vigésimo sexto amanecer.

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¿Recuerdan lo de la abstinencia? Pues esto es lo que pasaba.

Su ropa simplemente dejo de quedarle, para sus 4 meses y medio de embarazo había aumentado 2 kilos, otra cosa que pasaba con su cuerpo era la sensibilidad de sus pezones y las hormonas.

Las hormonas era otra cosa que odiaba, y Levi no ayudaba mucho, paseándose sin camisa y sólo esos boxer de licra frente a él, viéndose jodidamente bien  con o sin ropa.

El azabache se había "tomado" muy enserio lo de la abstinencia, llevaban mes y medio sin tocarse y eso a Eren ya lo desesperaba.

Aprovechando que estabán solos y que Eren estaba distraído, Levi llevaria a cabo su plan perfectamente planeado para que Eren cayera y así desquitar ese mes y medio sin contacto.

Se dio una ducha rápida, se colocó una toalla en la cadera y bajo para buscar a Eren.

El castaño estaba comiendo cerezas con chocolate, al ver a Levi entrar en la cocina casi se atraganta.

Fingió no verlo y seguir comiendo, se alteró al sentir a Levi limpiar su labio y ver como lambia de su dedo el chocolate que había quitado de sus labios.

Levi: Te ves tan lindo.

Eren: Y-yo si-siempre.

Levi se acercó más a Eren quedando cerca de los labios de su pareja, sabes, ahora mismo quiero quitarte la ropa y hacerte mío en la mesa de el comedor.

Eren: ¿Qu-que tt-te hace pensar qu-que quiero?

Levi: ¿No quieres?

Levi tocó las piernas de Eren mientas lo besaba, se dirigió al cuello de el castaño donde dejo un chupetón, metió las manos a la playera y tocó desde el vientre donde el bebé protestó hasta llegar al pecho de su castaño, al tocar los pezones ahora sensibles un gemido salió de aquella boquita que volvía loco a Levi.

Levi: Última oportunidad lindo, tomalo o déjalo.

Antes de que pudiera contestar algo coherente Levi lo tomo en brazos para llevarlo al comedor.

Dejándo a Eren sentado en la mesa se colocó en medio de sus piernas para comenzar a besarlo.

Y que se puede decir, las hormonas ganaron.

Eren se mantenía con los ojos cerrados, Levi se encargaba de dilatarlo mientras besaba sus piernas y cadera.

Cuando estuvo listo y sintió el miembro de Levi mordió su labio.

Eren: ¡Ahh!

Levi: De no ser por el bebé, créeme no caminarias bien las siguientes semanas.

Eren: ¡L-levi!

Las embestidas empezaron lentas y profundas, el castaño se encontraba al límite, a la 3 embestida se corrió.

Levi: Tan lindo.

Eren: Ca-callate.

Levi: Si me permite joven seguiré haciéndolo sufrir por los siguientes 60 minutos.

Me amaras al amanecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora