Me amaras al amanecer

Todo bien.

Y ahí estaba el castaño, frente al televisor llorando y comiendo helado.

Levi: Amor...

Eren: ¿Por qué tiene que sufrir tanto?

Levi: Mi vida...

Eren: ¡Esto no es de Dios!

Levi: Eren...

Eren: ¿Q-que?

Levi: Deja de llorar amor, te vas a secar.

Eren: ¡Voy a morir deshidratado! ¡No puedo dejar de llorar!

Levi: Amor, ven te abrazo.

Eren: ¡S-sii!

Levi tomó a Eren en brazos para intentar calmarlo, entre sollozos logró que su castaño dejará de llorar prometiendo que le prepararía cream brulee.

Resumiendo esto un poco, Eren se comió 3, obligó a Levi a ir por dulces de menta y chocolate agregando al pedido una malteada de chocolate y galletas de nuez.

🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒🍒

5 meses habían pasado desde su reconciliación,y Eren seguía extraño, sus pantalones empezaban a apretar de las caderas, sumado a su extraño gusto repentino por las cerezas.

El castaño podía comerlas todo el día, devoraba tazones enteros de ellas.

También estaban sus cambios de humor, podía llorar por horas, o enojarse, ó simplemente dormía largas siestas.

Preocupado Levi lo convenció de ir al médico.

En el consultorio le mandaron a hacer exámenes de rutina, examinaron su peso, sus pulmones y corazón todo normal según el doctor.

Dr: Bueno tengo los análisis, incluso pedí incluyeran el test de embarazo.

Levi: ¿Y?

Dr: Todo salió bien, y en cuanto a la prueba salió negativa, tal vez el señor Eren pasa por una etapa de estrés y por eso estos cambios.

Eren: Ves te dije que no pasaba nada.

Levi: Ya perdón.

Dr: Aún así le daré unas vitaminas y suplementos.

De regreso en su bello hogar Kuchel los esperaba junto al pequeño Kin, al ver a Eren lloro para que su "mami" lo tomará en brazos.

Eren: ¿Quién es el bebé más hermoso?

Levi: ¿Yo?

Eren: ¡Ash! Dije bebé y hermoso, no enano y gruñón.

Kuchel: ¡Auch!

Levi: Por eso decía que mejor me quedo calladito.

Kuchel: ¿Qué les dijo el médico?

Levi: No tiene nada.

Eren: El doctor pensó que incluso podría estar embarazado, lo cual es imposible, llevo bien la cuenta de las píldoras, está vez si es exacta.

Kuchel: Me quedo más tranquila, ¿quieres cerezas Eren?

Eren: ¡Si!

Lo que ninguno sabía es que dentro de poco alguien llegaría a sus vidas.