Hilos de Amor (COMPLETA)

Capítulo 10

Decido ponerme los audífonos, puesto que así me sentiré menos incómoda. Debido a la ansiedad siempre siento que la gente me observa, aunque no sea así. Es difícil de explicar cómo me siento en los espacios cerrados. ¿Mido mis movimientos? ¿Qué pasaría si lo hago?

Bajo del metro y miro a mi derecha. Por la otra puerta se baja Aaron y empiezo a preguntarme si estará siguiéndome. Salgo de la estación y camino hacia el apartamento. Aaron va a mi lado, <<quizá simplemente va a central Park>> pienso hasta que entra en el edificio.

—Oye —cuando deja caer la puerta en mis narices, aunque me lo merezco; hice lo mismo ayer.

—¿Me estas persiguiendo? —pregunta descarado.

—No, solo voy a mi apartamento. ¿Tú me estás persiguiendo? —digo a sus espaldas, pero no responde.

Con un movimiento de la cabeza saluda al portero, quien le sonríe. ¿Vivirá aquí? ¿Y no lo he notado?

—Buenas tardes.

—Buenas tardes señorita —dice el hombre. Me aproximo a Aaron quien ya pidió el ascensor. <<Me subo, no me subo, me subo o subo por las escaleras. Después de todo necesitas hacer ejercicio, Lara, pero sabes que solo es una excusa para no estar con él en un lugar pequeño y sentirte incomoda>>

Decido ir por las escaleras y las subo de dos en dos; cosa que siempre hago. Al llegar al segundo piso, noto que la puerta de Eddie está abierta y resuelvo ir a ver si todo está bien y curiosear. En ese momento el elevador abre las puertas y Aaron sale al mismo tiempo que Eddie. << ¡Pero, qué rayos! >> pienso.

—Hola ¿Se conocen? Los quería presentar —dice Eddie.

—¿Presentar? ¿Lo conoces? —pregunto a Eddie y al mismo tiempo Aaron pregunta:

—¿La conoces? —Si no fuera yo la que está aquí, pensaría que la escena es cómica, pero no para de parecerme cada vez más extraña.

—Sí, Lara, él es mi primo, del que te hablé —dice y yo abro los ojos. ¿Su primo? O sea que yo vivo en.... —Y, Aaron, ella es Lara. Está viviendo en tu apartamento — dice Eddie.

—Parece que al final íbamos a mi apartamento, no al tuyo —dice Aaron y yo todavía no salgo del asombro.

—¿Ustedes de dónde se conocen? Ah, ¿él es el chico que me contaste que las invitó al grupo de arte? —dice Eddie y yo abro los ojos aún más. Miro a Aaron. Una sonrisa de lado se asoma en su rostro.

—¿Qué? No, bueno sí... pero él no me invitó; fue su amigo Jeremy —digo.

—Bueno, como sea, yo solo vine por el cheque y me largo —dice Aaron y Eddie asiente. Saca el sobre que mi madre le dio y se lo da.

—No se te olvide lo de la fiesta de mañana. Te iba a dejar el sobre en portería. Voy a llegar tarde. ¿Te llevo? ¿Viniste en tu coche? —dice Eddie.

—No, me iré en el metro —dice Aaron.

—Bueno. Hoy te ves hermosa, Lara —dice Eddie y me sonrojo como una boba.

—Debo ir por algo al apartamento —dice Aaron.

—¿A mi apartamento? —pregunto y asiente. ¿Qué va a buscar? ¿La cama en donde <<yo>> duermo? —. Se supone que viene amueblado —digo.

—Solo quiero ver si se me quedó algo —dice y no muy convencida llamo al elevador.

—Adiós princesita —dice Eddie en cuanto el elevador baja al primer piso. Me besa en la mejilla y se va. Es increíblemente tierno, y yo sonrió como una pequeña de 10 años.