Estancado en tu mirada.

Capítulo 22.

MIÉRCOLES, JULIO 4, 2018.

—No puede ser cierto que aún sigan hablando de eso.

Dakota masticaba con indignación la dona que tenía en su mano.

—Irene no me ha vuelto a hablar desde esa noche.

Tanto Steve como Dakota habían quedado en ridículo esa noche cuando comenzaron a decir el discurso de: "Porque las parejas eran una mierda."

Muchas personas lo habían grabado y subido a sus diferentes redes sociales donde se viralizó por todo el colegio.

A pesar de que ya hubiese pasado una semana desde aquella fiesta la mayor parte de los chicos aún no se olvidaban de eso y pasaban constantemente hablando sobre el tema.

Esa era una de las cosas más mierda que podía tener el colegio. A las personas no les importaba la forma en la que te sientes al respecto por escuchar lo que dicen, prefieren burlarse hasta encontrar algo nuevo.

Por eso es que había decidido no asistir al colegio durante una semana entera. Y a pesar de que el tiempo ya halla pasado la gente parecía no poder olvidar el tema.

—Emilio tampoco.

Mis amigos habían fallado con sus parejas después de eso. Steve se había emborracho por culpa de Irene ya que habían cortado por una pelea que tuvieron y Dakota no había vuelto a hablar con Emilio.

Me parecía graciosa la situación que estaba sucediendo con Emilio porque sabía perfectamente que él quería que la chica sufriera por unos instantes por ser tan insolente con él.

La situación de Steve e Irene me daba pena porque yo amaba la relación que ambos tenían. Si se separaban de verdad iba a ser algo desastroso.

—Presidente del Consejo, ¿ya tienes listo todo?

Durante la última semana había quedado casi hasta las cuatro de la mañana preparando todo lo que era para el baile de graduación. Las entradas, buscando el lugar, la decoración y sin dudas haciendo que todo el evento se exparciera por el colegio.

Tenía planeado dos cosas que iban a ser importantes.

La fiesta de graduación nos haría sentir que el inicio de una nueva vida estaba comenzando para todos. La segunda fiesta para despedir el final del año estaba siendo preparada para emborracharse tanto, o incluso peor, de lo que Dakota y Steve lo hicieron.

—No he dormido por planificar esa mierda. Por esa razón traje este maldito envase donde hay café.
—Así me gusta. Que trabajes como el esclavo que eres.

Dakota se rió y le dio una palmada a Steve.

—De verdad que ni siquiera se por qué me postulé como presidente.
—Porque Noah iba a ser el segundo a cargo y podían tener sexo desefrenado pensando que tú eras su jefe y él un empleado.

Steve me miraba con una sonrisa pero yo no pude negarlo. Noah me había convencido para que me postulara en el Consejo Estudiantil, además me había asegurado que íbamos a cumplir esa fantasía.

Lo hicimos.

—Sí. Tal vez también es por eso pero no precisamente.

Dakota y Steve se sorprendieron ante mi comentario y se levantaron.

—¿Si lo hicieron ahí?

El timbre sonó y yo caminé sin responderles.

—Se los dejó a su imaginación.

Seguimos caminando cuando alguien tomó de mi brazo y me hizo girar.

—Carven.

Al mirar al hermano menor de Noah frente a mí la sonrisa que tenía en mi rostro desapareció.