Dan's Girl {#BieberAwards}

49.No te metas con Megan Kanter

No me iba a conformar tan solo con ganarles, me iba a encargar humillarlos hoy día. Gregory se había encargado de eso al taclearme contra el suelo a propósito esta noche, si él pensaba que eso iba a quedar ahí, puesta él estaba muy equivocado.

Llego a la cancha, y le doy una señal al entrenador, quien al verme me pregunta con la mirada si de verdad quiero entrar de nuevo, asiento con la cabeza. Él lanza un suspiro frustrado, y le hace una señal al árbitro, y este último asiente con la cabeza.

Entro patinando, y llego hasta donde está Zoen.

—Tenemos que aplastarlos, ¿me entiendes?—le digo, él asiento con la cabeza. —Cúbreme la espalda.

— ¿Cuándo no lo hago, Meggy?—me pregunta y le da un suave golpe a mi casco antes de regresar a su posición.

Reviso el marcador. Vamos ganando pero únicamente por dos puntos. Y eso no me bastaba, no después de que Gregory no quiso llevar la fiesta en paz.

Nos toca sacar, Cameron rápidamente le da un pase corto a Kayes, quien sale rápidamente corriendo de nuestra zona, evitando que el otro equipo ataque. Uno de nuestros contrincantes le quita el disco cuando está a apunto de enviárselo a Zoen. Pero no me quedo en mi posición, y corro hacia donde está el disco.

Tal vez no los igualaba en tamaño, pero era mucho más veloz y ágil que todos ellos. Así que de un solo golpe y antes de que el jugador que lo tenía se dé cuenta, el disco llega hasta Zoen, quien corre con él a zona de anotación y anota.

Y así fue todo el partido. No permitimos que el disco volviera a entrar en nuestro arco.  Y el único que no había metido una anotación fue Elijah, ya que era el portero. Pero todos, sin excepción alguna, habían anotado en el arco. Faltaba un minuto más y el partido terminaría. Y Gregory, el capitán del otro equipo, estaba que echaba humo por las orejas, gritándoles a los otros integrantes de su equipo.

Ben, un chico del equipo, saca el disco y me lo entrega en un pase limpio, en unos segundos el partido finalizaría, patino con el disco hasta donde está Gregory y el resto de su equipo quienes ya se dieron por vencidos y ni siquiera están jugando.

—Gregory, toma. Para que rescaten su orgullo. —le digo, pasándole el disco.

Gregory mira el disco y levanta la mirada para encontrarse con la mía. Lanza su stick al suelo y se acerca a mí. No retrocedo ni un solo pasó.

—Cuida tu boca, Kanter. —me amenaza.

— ¿Recuerdas el partido de hace unos cinco meses?—le pregunto.

—Por supuesto. Tu horrible rostro empeoro después de que cayeras de cara contra el suelo después de que te puse cabe.

—Lo recuerdas. —Digo sonriendo. —Me alegro.

Me acerco a él, y antes de que se dé cuenta de lo que tenía planeado hacer, levanto mi rodilla y fuertemente lo golpeo en sus partes nobles. Cae al suelo y cubre su entrepierna con sus manos, si pudiera ver detrás de ese casco podría decir que está llorando pero no estoy cien por ciento segura.