𝕽𝖔𝖘𝖊𝖘 「 𝕽𝖊𝖒𝖚𝖘 𝕷𝖚𝖕𝖎𝖓 」🥀

14/. El principe 🥀

Te regalo todo lo que dije hasta ahora.
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-Tienes que controlar tu mal genio Regulus. - decía Andromeda Black al más serio de sus primos.

Regulus miro irritado a Andromeda, estaba enojado desde ayer en el partido de quiddich , cuando la menor de los Scamander había salido del campo con  con una expresión irritada.
Aquello le había causado insomnio  y las ojeras y su mal humor estaban más presentes que otros días, en donde él ignoraba a todo aquel que no consideraba digno de su atención.
Y esto mismo se había preguntado Regulus toda la noche.

¿Que había hecho Rose Scamander para atraer su atención?

Y por más que le daba vueltas al asunto no lograba entender que estaba ocurriendo ¿Que era esa extraña calidez en su pecho? Llego a pensar qué tal vez era atracción sexual , pero rápidamente descartó la idea, no había algo más ahí. 

Ella era tan delicada como su nombre.

Ella estaba tan viva como una rosa.

-Por cierto, quería hablar contigo desde ayer, pero parecías tener algunos problemas con esas chicas que te siguen a todos lados. - ni las menciones. -pensó Regulus.

-¿Por que querrías hablar conmigo?- dijo con su tono frió y hostil.

-Bueno, se acerca mi cumpleaños y yo esperaba que pudieras asistir a mi fiesta. -Andromeda estaba nerviosa y Regulus no sabía el motivo, pero decidió ignorarlo, tenía ya suficientes cosas en la cabeza como para agregar a otra chica en ella, solo Rose podría quitarle el sueño.

-Todos los años mi familia y yo asistimos, no entiendo por qué sería diferente esta vez. - Regulus estaba siendo más tosco de lo normal, pero justo ahora lo único que pensaba era en llegar a su dormitorio y poder dormir una larga y cómoda siesta.

-Si, yo sé que todos los años asistes, pero esta vez yo esperaba que invitaras a alguien. -Su prima le sonrío traviesa.

-No invitaré a ninguna de esas locas que me siguen a todos lados. - contestó  Regulus con enfado.

-No hablaba de que invitaras a alguna de las hermanas Parkinson, hablaba de que invitaras a alguien, una chica qué tal ve sea de la causa de tu mal humor. 

La mayor de las hermana Black quería a sus primos mellizos como unos hermanos, cuando eran niños solían pasar largas temporadas juntos y reír de alguna travesura de Sirius o posar para el ágil pincel de Regulus.
Cuando Andromeda entró a Hogwarts los mellizos las extrañaban demasiado y en ese lapso poco a poco se dieron cuenta que lo único en común que tenían los mellizos, era el amor fraternal por su prima. Poco a poco la dulce amistad que existía entre ellos, se fue desvaneciendo, así como la alegría del pequeño Regulus, que era educado para ser el próximo representante de la honorable familia Black.

-No se de que me hablas. -bufó molesto.

-Claro que sabes, hablo de la pequeña chica que defendiste ayer. -Andromeda le sonría divertida. -Es muy bonita Reg.

-Andy...- Regulus suspiró derrotado.- Ella no me interesa, deberías decírselo a Bellatrix también, solo me gusta burlarme de ella. -dijo tratando de sonar lo más creíble posible.

-Regi, eres como mi hermanito pequeño, sabes que siempre te escuchare y no voy a juzgarte. -Lo arrastró hacia el patio. -¿Qué sucede?

-Yo no lo sé. -Se sincero Regulus.

-¿Qué es lo que no sabe el pequeño Regi? - dijo Sirius posándose frente a ellos junto a Peter.