38./Almas viejas 🥀

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En esta y en otra vida siempre serás tú.
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Hace algunos años en donde no se hablaba de un nombre prohibido, pero los prejuicios eran aún más grandes, Elena Ravenclaw estudiaba su sexto año en Hogwarts y pertenecía orgullosamente a la casa de sus ancestros. La joven gozaba del trato de princesa de los alumnos, le agradaba sentirse aceptada pero a la vez se preguntaba:

¿Qué era real?
¿Realmente a todos les agradaba?

Aquellas preguntas habían estado rondando por su mente desde el momento que se dio cuenta lo que significaba ser una Ravenclaw, no sólo en casa si no en esencia y sangre. Con el tiempo Elena se volvió paranoica ante el peso que significaba su apellido y se alejó, se excluyó donde nadie pudiera encontrarla.

Nadie excepto un chico que con el tiempo logró robarle el corazón.

Tadeus Lupin era el nombre del joven, un estudiante común de la casa Ravenclaw que había perdido a su padre a edad muy temprana.
Había sido asesinado por el ministerio de magia al ser un licántropo, condición que le fue dada un hombre lobo que cumplía con las órdenes de Grindelwald.

El padre de Tadeus anteriormente había trabajado en el ministerio y se había unido a las filas de Grindelwald como espía, al hacer esto firmó su sentencia y la de su hijo, así como la de su futura desendencia.

Tadeus era un licántropo, él lo aceptaba ya que había sido mordido cuando era un bebé y no recordaba haber sido algo más, tenía una sentencia si y probablemente terminaría como un marginado pero él no era de los que se rendía, él en lugar de sufrir y llorar tomó una filosofía diferente.

Quería tener la vida más normal que le fuera posible, quería ser absolutamente feliz y regalar felicidad hasta el día que terminara como su padre, el Ravenclaw ya había aceptado su destino desde hace mucho tiempo.

Mientras haría el bien y demostraría que él era Tadeus Lupin y no un hombre lobo.

Estaba próxima de la graduación y ante la muerte de una chica de su casa llamada Myrtle, Tadeus había decidido no volver a pisar el baño de prefectos, que era el lugar en donde solía encerrarse cada luna llena.

Tenía miedo, la luna llena había caído aquella trágica noche y cuando se transformaba perdía cualquier rastro de humanidad.

¿Había sido el?
¿Había asesinado a Myrtle?

Se estaba volviendo loco de una culpa en la que no sabía si encajaba. Desesperado miraba el cielo que se encontraba oscureciéndose, la luna saldría pronto y necesitaba esconderse o su normalidad se acabaría.

Se estaba rindiendo cuando una puerta apareció frente a sus ojos.

¿Estaba ahí antes?

Desesperado entro y se encontró con un enorme salón vacío y en el centro una chica silenciosa que recordaba haber visto,era la solitaria Elena que siempre le había causado intriga.

Se acercó a ella apresurado, tenía que salir de ahí antes de su transformación, tenía que ponerla a salvo y encerrarse en ese lugar toda la noche.

-¡Tienes que irte! - habló fuerte sobresaltando a la chica.

-¿Qué?- Lo miró sin comprender sus palabras.

-Elena tienes que irte ahora, estás en peligro. - Los ojos de Tadeus gritaban desesperados y Elena por un momento volvió a ser Elena.

-¿Estas bien Lupin? ¿Te ayudó en algo? - se levantó asustada por la postura del chico, desde donde ella estaba se veía enorme, intimidante.

-Necesito que salgas de aquí ahora. - la miró desolado. - Por favor.

Elena no entendía, pero ante la sinceridad de su mirada tomó sus cosas con rapidez y cuando salió de la sala pudo jurar que escuchó un aullido.

🥀

Había pasado una semana y Elena curiosa había estado siguiendo a Tadeus, aunque el joven era un año mayor que ella se las pudo arreglar para seguirlo aún en clases, suerte que tenía ese gira tiempo.

El chico era alegre y popular, se dio cuenta que todas las chicas morían por que él, aunque también notó que él nunca las miraba, era la clase chico que se ofrecía ayudarte si lo necesitabas, era amable y apuesto pero también era noble. Elena pudo notar que él jamás aceptó a alguna de esas chicas y no por patan si no por algo más, algo que ella no lograba comprender.

Una semana después y nada extraño había pasado, solo un estudiante normal, estaba a punto de rendirse en descubrir el secreto de Tadeus, hasta que un día mientras ella se encargaba de un ensayo de adivinación, el chico se acercó con la misma expresión que aquella ves, desesperada y desolada.

Tal ves la expresión más sincera que había visto en su vida.

-Se que me has seguido. -el la miró nervioso, tímido.

Algo muy diferente a lo qué Elena había visto las últimas semanas.

- Necesito que me ayudes. - sus facciones eran delicadas aunque pudo percatarse de una escandalosa cicatriz que decoraba su arco de cupido. - Por favor.

-Esta bien.- no sabía si era una trampa y en realidad no era el príncipe decuento La joven lo siguió hasta la torre de Ravenclaw, caminaron por un largo pasillo en silencio hasta que el chico se detuvo.

-Creo que hice algo malo. - Se sincero dándole la espalda, no tenía el valor para verla a los ojos, ni siquiera sabía cómo le había confesado su miedo tan abiertamente, siendo ella una desconocida.

-¿Qué hiciste? - aunque perteneciera a la casa de la sabiduría, la joven estudiante se encontraba aturdida sin comprender las palabras del chico que tenía delante de ella.

-Ese es el problema, no sé qué hice y no sé si fui yo. - suspiró débil.

-¿Quieres que te ayude a averiguar qué hiciste?- no sabía cómo lo haría sin tener tantos detalles pero quería ayudarlo, quería protegerlo.
-¿Como lo hago?

Esta ves Tadeus se giró a verla, no sabía cómo confesarle su secreto, si Elena lo tomaba mal y se lo decía al ministerio estaba muerto.
Pero Elena era una Ravenclaw, una persona inteligente de nacimiento y tal ves podría ser la única persona capa de comprender que el solo era un licántropo una par noches al mes pero seguía siendo Tadeus, el chico amable de siempre.

Pero no tenía el valor para decirlo y ver la decepción y repulsión en los ojos de la bella joven, ella tendría que verlo por sí misma.

-Se que tienes un gira tiempo.- esta asintió confundida. - Necesito que vayas a la noche que murió Myrtle y me digas si la asesine.

-¿Que?

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𝕽𝖔𝖘𝖊𝖘 「 𝕽𝖊𝖒𝖚𝖘 𝕷𝖚𝖕𝖎𝖓 」🥀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora