𝕽𝖔𝖘𝖊𝖘 「 𝕽𝖊𝖒𝖚𝖘 𝕷𝖚𝖕𝖎𝖓 」🥀

10/. Has perdido la cabeza 🥀

No es imposible, simplemente es muy cercano a no posible.
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La bella Rose caminaba soñadoramente hacia su sala común, eran pasadas de las cinco de la tarde y moría por contarle a sus amigas de la tarde tan maravillosa que había pasado con Regulus. Él había sido un completo caballero, como ella esperaba que sería, había escuchado muchas historias sobre los fríos y déspotas Black, y Rose aceptaba que todos esos rumores eran ciertos. Regulus Black era frío, arrogante y con mucha clase y educación, era un perfecto caballero inglés, pero no solo era eso, también era divertido, sarcástico eh intimidante. Pero la más joven de los Scamander era curiosa por naturaleza y Regulus se había vuelto en enigma personal, moría por descubrir que más cosas ocultaba aquel chico de ojos esmeralda.

Al llegar al retrato de la dama gorda, Rose la saludó con entusiasmo, después de una nueva demostración de ópera, la dama gorda la dejo entrar a su sala común, donde fue recibida con las caras de preocupación de Lily y Marlene.

-Hola chicas ¿que... -fue interrumpida por sus amigas abrazándolas fuertemente. -Rose solo supo corresponder el gesto, amaba los abrazos.

-¡Rose! Nos tenias tan preocupadas, los chicos están en la enfermería.- Marlene le decía con una gran preocupación en sus ojos.

-¿En la enfermería? ¿Qué sucedió?-Apenas había pasado una semana de conocer a los merodeadores, pero le agradaban lo suficiente como para estar preocupada.

-Aun no sabemos bien, según la profesora McGonahall fue por una poción muy fuerte que inhalaron.-Lily también lucia preocupada, es que aunque no quisiera admitirlo, esos chicos bromistas le agradaban y le importaban.

-¡Que horror! ¿Podemos verlos?- La pequeña Rose ya comenzaba a angustiarse por los merodeadores.

-Si, podemos ir después de la cena, solo no hay que demorar -concedió la pelirroja.

Las amigas cambiaban sus ropas por sus uniformes para poder bajar a cenar. Rose había comido una tarta junto a Regulus, pero aún así tenía hambre.
Y moría por un poco del delicioso puré de papas que cocinaban los elfos.

-¿Y entonces... tú y Regulus?- Marléne miraba coqueta a la pequeña Rose que ataba su corbata escarlata.

-Somos amigos. -Le sonrío Rose desde el espejo.

-¿Amigos? Lo creería de cualquier otro, pero estamos hablando de Regulus Black, el no le habla a cualquiera y mucho menos tiene amigas.- Marlene temia por su amiga, sentía que el Slytherin solo la usaría, por que había que aceptarlo ella era sumamente hermosa y eso la ponía en peligro.
Pero también seguía impresionada por la buena química que había visto entre ellos esa tarde.

-Regulus no es malo, solo es diferente. Yo sé lo que la gente dice de mi, piensan que estoy loca. -dijo esto último susurrando como si fuera el mayor de los secretos.- Regulus es como yo, un rumor.-Rose les sonrío a sus amigas que la miraban dudosas.

Era cierto, en esta semana el alumnado de Hogwarts se había encargado de esparcir rumores sobre la pelinegra, decían que la habían expulsado de su anterior escuela en Francia por estar tan loca que casi se tira de un vacío, algunos rumores eran todavía peores que insinuaban un romance entre los dos hermanos Scamander. Esto era ignorado por ambos hermanos pero no dejaba de ser incómodo. Por eso cuando Rose se enteró que no era la única víctima de rumores que no tenían ni pies ni cabeza, se interesó aún más por el heredero de los Black.

-Solo promete que tendrás cuidado.- le pidió Lily mientras habría la puerta del dormitorio.

Al salir se encontraron con la cuarta compañera de cuarto misteriosa, era de sexto curso, como Narcisse.