Nos habíamos levantado a las seis y media de la mañana, después de ducharme me apresuré en bajar a la cocina para preparar un desayuno rápido y ligero, así poder tener tiempo suficiente para llegar temprano a la universidad.
En cambio, en ese momento Valtiel se encontraba comiendo del plato con hotcakes que puse frente a él con aire despreocupado, y sin darle demasiada importancia a la hora marcada en el reloj de la cocina. Tamborileando mis dedos sobre la superficie de la mesa con impaciencia, me dedicaba a mirarlo con el fastidio notándose en mis facciones.
-Si no te apresuras me iré solo- Murmuré con irritación en mi tono de voz.
-¿No puedo disfrutar de mi desayuno? Tu lo hiciste más temprano con tu padre antes de irse- Musitó sin inmutarse-No seas así conmigo, Jace.
Puse los ojos en blanco y me levanté de la mesa, dejando escapar un suspiro de impaciencia. Miré por el rabillo del ojo una vez más a Valtiel, irritandome aún más al ver una sonrisa burlona dibujada en su rostro. Conteniendo las ganas de borrarsela, me encaminé a la puerta de entrada colgando mi mochila al hombro; si en su primer día quería llegar tarde, que lo hiciera, yo no lo iba a esperar.
Salí de casa dispuesto a no perder un minutos más en ir a la universidad, y avancé por el camino de concreto hacía la acera, un agarré en mi brazo izquierdo hizo que me detenga a mitad de camino; observé a Valtiel sin molestarme en disimular mi mal humor.
-Al fin... ¿Lo hacías a propósito?- Cuestioné cuando sonrió burlesco nuevamente.
-No, simplemente no creí que fuera necesario tener tanta prisa- Contestó mirándome con fijeza-Además, quiero que vayamos juntos.
-Entonces, vámonos- Su agarre en mi brazo impidió que diera otro paso-Valtiel.
-No iremos caminando- Informó con sorna, señalando con el mentón hacía el garaje de mi casa.
Una moto Harley Davidson en color rojo y negro se encontraba estacionada frente a la puerta del garaje, un poco sorprendido miré a Valtiel, quien no borraba esa expresión de suficiencia.
-Y luego quieres que no te llamen pandillero- Comenté recordando como lo llamó mi padre.
-Ja... Qué gracioso- Rió irónico, poniendo una mano en mi espalda instándome a avanzar hasta el vehículo motorizado.
Me aparté un poco dejando que se montara en la moto, dudando apenas en subirme al darme cuenta que sería la primera vez que subiría en una, Valtiel me observó expectante luego de encenderla.
-No te quedes ahí, el tiempo corre- Me apuró entregándome un casco negro.
Soltando un suspiro me coloqué el casco y subí al asiento de atrás, sin saber donde colocar mis manos. Valtiel igual de impaciente que yo hacía unos minutos, sujetó mis manos haciendo que rodease su cuerpo, ahogué una exclamación por la sorpresiva acción.
-Sujetate fuerte, iremos muy rápido- Avisó girando un poco su rostro para verme.
-De acuerdo- Dije asintiendo, mirando como se colocaba un casco personalizado con ilustraciones de flamas.
Arrancando la moto nos pusimos en camino a la universidad, haciendo caso a su indicación me aferré con más fuerza a su abdomen, sintiendo el viento chocar contra nosotros debido a la velocidad.
Sonreí para mi mismo, pues a pesar que era la primera vez que subía a una moto, sin duda alguna era una experiencia increíble.
Luego de aproximadamente unos diez minutos Valtiel fue disminuyendo la velocidad, hasta terminar estacionándose frente al campus de la universidad. Tardé un poco en bajarme, y cuando ambos estuvimos parados junto al vehículo, pude percatarme de las miradas de los demás estudiantes sobre nosotros, más bien sobre Valtiel.
Nuevamente su presencia era algo que no pasaba desapercibida para los demás, especialmente para el género femenino, por que en ese momento eran en su mayoría las que no quitaban la vista de él, intrigadas por el nuevo estudiante. Claro que eso no me sorprendía ese hecho, lo que me causaba ese efecto era que me sentía un poco molesto al respecto...
Dejé de lado esos pensamiento, distraído por la carrera que había emprendido Cosette al vernos desde entre los estudiantes, con una sonrisa enorme estampada en su rostro.
-¡Val- Su grito fue interrumpido por la mano de Valtiel cubriendo su boca.
Con algo más que sorpresa, miré a Valtiel frunciendo las cejas.
-Soy Evan Hudson- Le corrigió asintiendo mientras la veía, quitando su mano.
Cosette sin despegar su vista de él imitó su acción, asintiendo de igual manera; entendiendo rápidamente.
-¿Qué haces aquí?- No tardó en preguntar, con la emoción visible en su voz.
-Él también vendrá a la universidad- Contesté cruzando mis brazos sobre mi pecho.
-¡Qué emoción!- Exclamó feliz. ¿En serio? No se nota.
- Bueno, por el momento primero debo ir a inscribirme- Comentó mirándola divertido por su entusiasmo.
-Si quieres puedo acompañarte- Se apresuró a sugerir, lo que me provocó más disgusto.
Valtiel me observó con aire divertido por un momento volviendo su atención a Cosette, entonces me di cuenta que otra vez sabía mis emociones... ¡Y disfrutaba verme de esta manera!
-Esta bien, guíame- Aceptó sonriente, maldito. -Jace, adelantate a ir a tu clase ¿Tenías prisa, verdad?
Sonreí falsamente y asentí, aunque lo único que quería era arrancarle la cabeza... ¿Porqué? Ni yo lo sabía.
Caminé con ellos hasta entrar en el edificio, siendo observados (bueno, Valtiel a decir verdad) por cada estudiante que cruzábamos en el camino, cuando ya habíamos recorrido todo el pasillo, Cosette se giró a verme.
-Yo lo llevaré a dirección, no te preocupes - Me dijo con una sonrisa-Tú ve a tu clase.
-Sí, esta bien- Mascullé apretando los labios en una linea.
-Estate alerta- Advirtió Valtiel con seriedad antes de irse junto con Cosette.
Ingresé al salón antes de que comenzara la clase, dándome tiempo de pensar en el porqué de mi repentino disgusto, pues era completamente normal que Valtiel atrajera tanto la atención de las personas. De cualquier forma, no estaba bien que estuviera reaccionando de esta manera, por que todo de repente era tan confuso y esto solo empeoraba las cosas, confundiendo me cada vez más. Me límite a poner atención a la clase una vez el profesor entró al aula, dejando de lado mis cavilaciones.
Había completado toda la jornada y no vi rastro de Valtiel o Cosette por ningún lado, ni siquiera en la entrada de la universidad donde estuve esperando a unos pasos de la moto de Valtiel, no sabía en donde se habían metido.
Lo que sólo aumentó más mi mal humor, por lo que decidí regresar a casa caminando decidido a hablar con Valtiel más tarde. En el camino a unas manzanas del vecindario me encontré con Jason, quien había orillado su vehículo cerca de la acera por la que transitaba regalándome una sonrisa de alegría, lo que hizo que mi molestia disminuyera un poco.
-Jace ¿Vienes de la universidad?- Preguntó conduciendo a baja velocidad su auto.
-Así es- Contesté.
-Deja que te lleve, también voy regresando a casa- Se ofreció sin dejar de sonreír.
Lo pensé por un momento, pero opté por subir para llegar más pronto a casa. Además, si Valtiel se había ido con Cosette, yo podía ir a donde quiera con Jason... ¡¿Qué estoy pensando?!
-Esta bien, gracias- Dije al sentarme en el asiento del copiloto.
-No hay problema- Murmuró reanudando la velocidad para ir a casa.-No podía dejarte caminar hasta tu casa después de ver tú semblante ¿Ocurrió algo?
-No... Sólo olvidé unos apuntes- Respondí con rapidez, evitando pensar en mi disgusto con Valtiel.
-Entiendo- Dijo dejando escapar una corta carcajada.
No, él no lo entendía... Y yo tampoco.
∆Las cosas están por ponerse buenas, esperenlo ;D
Atte: TeamClock∆
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En las garras del demonio (EDITANDO)
RomansaJace, un simple estudiante universitario, se ha visto envuelto en la tarea de lidiar y convivir con un demonio encantador , luego de haberlo invocado una noche por una extraña ouija, poco a poco se darán cuanta que no era lo que esperaban... (No com...