La Sombra de la Arena. (Shinki Y Tú)

32

Antes de comenzar les dejo la imagen del maquillaje de Suki y a Shinki sin maquillaje. Me sigue encantando como se ve Shinki sin su maquillaje. Si les gusta la imagen les puedo dar más imágenes de Shinki sin maquillaje, ¿qué les parece?

Bueno, empecemos xd.

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-maldito Yoshiro.-habló entre dientes dejando caer el kunai.

-posesión de sombra exitosa...

Suki mientras temblaba por el dolor hizo un par de sellos y creó un clon más. Este hizo otro Chidori y le dio de nuevo en el pecho haciendo que esta vez gritará del dolor.

-Suki... lo siento...-hizo un jutsu invocando una águila y esta se fue.-llegué un poco tarde...

-¡eres un idiota, Yoshiro!-jadeaba del dolor.-¡este hombre ha hecho todo esto posible, Uchiha!-gritó mientras era pisado por el Nara.

-¡no lo escuches!-gritó el sensei.

-Yoshiro sensei...-sollozó.-¿qué está tratando de decir?

-¡este maldito hombre ha estado con nosotros todos estos años!-rió como loco.-¡él iba en busca de una de las gemelas Uchiha para obtener el Sharingan, su misión era preparar el Dojutsu para que estuviera en buenas condiciones hasta el día en que estuviera a mi poder!-de los ojos de la Uchiha comenzaron a caer chorros de lágrimas. Estas eran por el dolor que sentía, tanto por las heridas y las palabras que le decían.

-Suki... yo.-trataba de excusarse el Nara, pero no habían palabras.

-¡por eso desapareció! ¡no tuvo huevos al saber que vendríamos!

-¡te dije que te callaras!-dio un golpe en su cabeza causando su muerte instantánea.

-Sen..sei.-tapó su boca mientras comenzaba a hiperventilarse.

-¡sabía que eras un maldito traidor!-el rubio atravesó el pecho del Nara haciendo que cayera al suelo, a los pies de Suki.

-Suki...-susurró audible para la Uchiha.-lo que hice...-hablaba con dificultad.-no tiene perdón... conviertete en una gran shinobi... demuestra que eres una Uchiha...-sus últimas palabras fueron dichas mientras caían unas cuantas lágrimas de sus ojos.

Había quedado en shock, la azabache no sabía como responder tras todo lo dicho.

-¡acabaré con el trabajo!-el rubio corrió contra la Uchiha, pero cayó inconsciente al suelo. Había sido introducido en un Genjutsu, este era más potente pues los ojos rojizos de la Uchiha ya eran adornados por la tercera tomoe.

Ahora venía contra ella la chica de cabellos verdes y ella seguía sin reaccionar. Esta vez Shinki se abalanzó sobre ella teniendo cuidado de no lastimarla y a ambos los redeó un escudo de arena creado por el castaño.

-reacciona, Suki.-comentó enfadado al verla.

la abrazó poniendo su cabeza sobre su hombro.

-Shin...ki.-sollozó mientras lo abrazaba más fuerte, tras un par de segundos cayó inconsciente.

El escudo se desvaneció dejando ver al Kazekage y a Kankuro, se había encargado de la última chica.

Shinki se levantó mientras cargaba a Suki, la miró detenidamente, estaba muy herida.

-hey, déjame ayudarte.-el tío del castaño se ofreció a cargar a la Uchiha, pero él se negó comenzando a ir a la aldea.

-hablaremos cuando ambos atiendan sus heridas.-el pelirrojo caminó al lado de su hijo y tomó su hombro, él solo asintió.

Llegaron al hospital de la aldea donde se llevaron a la Uchiha a urgencias mientras que algunas enfermas trataban las heridas de Shinki.

En la sala de espera, estaban impacientes Hiro, Yoko, Seiji, Ayara, Yodo, Kankuro y el Kazekage esperando respuestas de la azabache.

Pasaron las horas y el único que había salido de la sala del hospital era Shinki, con varias vendas y uno de sus brazos enyesado.

Todos pasaron lo que quedaba del día en el hospital mientras se turnaban para entrar a ver a Suki.

Al día siguiente, pasando de medio día, un doctor cambiaba los sueros de la Uchiha y esta se quejó al sentir la aguja entrando por sus venas. Cerró con fuerza sus ojos y abrió uno de ellos con esfuerzo.

-Uchiha Suki.-comentó con una gran sonrisa el doctor al verla despertar.-Ella solo mordió su labio inferior.-iré a avisar que despertaste.-salió con paso apresurado de la sala.

Suki retiró el suero de su brazo dejando salir un quejido. Se levantó tambalenado por las heridas en sus piernas.

Cayó al suelo dejando salir un jadeo del dolor. Tomó una muleta que estaba al lado de la camilla y la tomó para ir al baño.

Estando allí emparejó la puerta y se miró al espejo. Había varias vendas en su rostro. Su brazo ardía bastante por lo que levantó la manga de su bata y encontró su cicatriz palpitando.

-brazo estúpido...-apretó el puño esperando a que ese dolor desapareciera.-¡ah!-tras echar un gritó golpeó el espejo rompiéndolo.

-¡suki!-entró Seiji corriendo al baño y la cargó.

-¡arde!-apretó su brazo justo donde estaba su cicatriz.

El sensei la dejó de nuevo en la camilla, el doctor volvió a poner el suero en su brazo notando la cicatriz.

-¿esto es de nacimiento?-Suki negó.

-le pasó en una pelea.-habló Hiro.-antes estaba de un color extraño, pero se quedó así.

-bien, pues.-rascó su nuca el doctor.-Suki está exaltada, será mejor que las visitas sean de dos en dos.

-yo me quedo.-dijo Shinki.

-y yo.-hablaron Yodo y Hiro al mismo tiempo.

-las damas primero.-se cruzó de brazos la rubia y los demás tuvieron que salir de la habitación.

-salimos de eso.-el castaño miró a la Uchiha.

-no quiero hablar, Shinki...-suspiró pesado.

-¿si no es ahora entonces cuándo?

-cuando era muy pequeña.-miró al techo comenzando a hablar.-yo y Sarada fuimos carnadas para atrapar a unos delincuentes que querían el sharingan, pensé que habían acabado con ellos, pero no. Hace poco me atacaron en un tren y por eso tenía la herida que señalaste ayer.-cerró sus ambos ojos.-volvieron, querían mi sharingan y lo demás ya lo sabes.

-pfff, no entiendo.-Yodo se cruzó de brazos.-saldré y les daré un tiempo a solas.-guiñó uno de sus ojos y salió riendo.

-¿cómo te sientes?-habló Shinki tras un pequeño silencio. 

-¿cómo me veo?-le miró con cara seria y una ceja alzada.

-solo un idiota contesta una pregunta con otra pregunta.  

-estoy viva y es lo que importa.-suspiró.

-y para celebrar que estabas viva rompiste el espejo del baño. Vaya.

-me miró feo.-se cruzó de brazos.

-era tu...-rascó su sien y después dejó salir una pequeña risa.-olvídalo.

-por cierto.-lo miró.-te ves bien sin tus plastas de maquillaje.-le sonrió de lado y el desvió la mirada pues sus mejillas se habían tornado de un color carmesí.-¿te sonrojaste?-rió un poco mientras se sentaba en la camilla.-¡déjame verte!-tratando de alcanzarlo cayó de la camilla mientras seguía riendo.

-ten cuidado o te lastimarás más.-se hincó a su altura tomándola por la espalda, pero ella seguía riendo.-¿qué te parece tan chistoso?

-me duele todo el cuerpo.-limpió una pequeña lágrima.-auch.

-los golpes te dejaron más tonta...-suspiró poniendo cara de rendición.

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-Eurídice.

Sé que ayer debía de subir capítulo, pero lo olvidé xd