La Sombra de la Arena. (Shinki Y Tú)

43

Una paz increíble y un lugar totalmente blanco donde no se veía ni un comienzo o un final, un silencio tan tranquilo donde lo único que se escuchaban eran tus pisadas. Eso mismo era lo que sentía Suki.

Sintió haber despertado del sueño, pero apareció ahí sin respuesta. Tenía miedo ¿eso era lo que otros llamaban el paraíso? ¿O el limbo? ¿Qué hacía ahí?

Tan solo siguió caminando sin rumbo, disfrutando de la tranquilidad del lugar y a la vez con una confusión en su interior. No sabía si recostarse a aprovechar del momento o seguir buscando respuestas.

La curiosidad ganó cuando logró divisar a una persona alta a lo lejos.

-¡hey!-gritó y comenzó a correr hacia él.

Había algo que la llamaba directo a él, pero a la vez sentía como su corazón se apretujaba sin saber el por qué.

Al sentirse más cerca del hombre, bajó el paso y se acercó a él lentamente. El hombre alto y de cabello azabache estaba de espaldas, había notado la presencia de la menor, pero no se giraba.

-¿podrías decirme qué es este lugar?-habló tímida acercándose más a él e intentando ver su rostro.-¡oye, te estoy hablando!-hizo un pequeño puchero mientras jalaba la camisa del hombre.

El hombre se giró mirando fijamente a la niña, se agachó a quedar a su altura y con dos de sus dedos golpeó levemente la frente de la Uchiha.

-en apariencia podrás ser igual a tu padre, pero en actitud no.-le dio una sonrisa honesta, la cual fue correspondida por inercia.-Sasuke era muy serio cuando tenía tu edad, me alegro que no seas igual que él.

-¿cómo conoces a mi papá?

-soy su hermano.-Suki abrió la boca impresionada.

-¿Itachi? ¿¡Tío Itachi!?-él asintió sin quitar su sonrisa y Suki lo abrazó rápidamente para después separarse y analizar cada rasgo y detalle del Uchiha.

-ahora explícame, ¿qué haces aquí? Te queda mucho tiempo aún

-pues... estaba con mi padre y...-Itachi la interrumpió.

-sé todo lo que pasó, pero no entiendo que haces aquí.-se levantó y tomó a la Uchiha por los hombros haciéndola caminar.-te queda una vida larga por delante, ahora vete y aprovecha que para hablar y conocernos tendremos una eternidad cuando tu momento llegue.-Suki tan solo lo miraba con sorpresa.-y nunca te desvíes de tu camino, déjame darte ese consejo como tu tío. Te esperan varias cosas para tu futuro, tanto buenas como malas, nunca pierdas tu voluntad, ¿entiendes?

-sí.-asintió levemente. El mayor puso su mano sobre los cabellos de su sobrina y los revolvió ligeramente para después darle un leve empujón para que comenzara a caminar.

En la sala donde se encontraba Sasuke y Orochimaru esperando alguna reacción por parte de la Uchiha, Sasuke estaba matando con la mirada a Orochimaru al ver que no pasaba nada.

-no me mires así, Sasuke. Sus signos vitales siguen estables, no hay nada de que preocuparse. Tardará en despertar.-se encogió de hombros y se dio la vuelta siguiendo con sus deberes. Sasuke solo tomó asiento en una silla cerca de la camilla.