Azul Iridiscente // yoonmin

Secreto por secreto

—¡No!—

Grito mientras cubro la boca del alto de pelo negro, oscuro como la noche. Su alma, su mirada y todo él es así.

—Min Yoongi, debes llevarlo a donde lo encontraste—

Dice el de piel más bronceada mientras el chico castaño está mandando algún mensaje desde su celular. También veo al pálido, sus ojos se tornan negros, no solo su iris, sino su pupila y la esclerótica completa, da más miedo que nada.

Ni sé qué hacer, ya mis ojos se ponen lila, y es que algo desde el inicio me ata al señor Min, y no quiero dejarlo, me pone triste siquiera pensarlo, aunque sé que es lo correcto.

—No, no, no— digo desesperado al ver que todos los amigos del señor Min están haciendo algo por separarme de él —Señor Min—

Ya estoy llorando. Las gotas saladas pronto se vuelven polvo que se desvanece en el aire al instante. Mi mano derecha talla mis ojos, mi nariz se torna roja y sé que en mis mejillas se marcan algunas estrellas negras.

—¡Basta!— escucho del señor Min —Jung Hoseok te ordeno que dejes de buscar contactos para deshacerte de Jimin. Jin deja de comunicarte con el Inframundo para que te de ubicaciones de dónde dejarlo. Namjoon deja de decir tanta estupidez. Y tú— me apunta —Ven acá, deja de agarrarle la mano a Taehyung—

Hasta ese momento veo lo que hago, aprieto esa mano con todas mis fuerzas, las cuales no parecen que molesten al elfo oscuro que es el amigo del señor Min, Taehyung.

—Ven aquí, ya, Park Jimin—

Su voz es tan dura y demandante que obedezco al instante. Camino aún con lágrimas, me pongo frente a él, y lo que hace el señor Min es tomar mis mejillas y acariciarlas. Su calor me embriaga y me hace sonreír. Le dedico una mirada, ya en mis ojos sé que ve el universo.

—Nadie lo va a alejar de mí, ¿comprenden?—

El ángel desterrado, aquel hombre moreno; y el vampiro con sangre demoniaca, se ven como si ambos compartieran telepatía.

—Namjoon, Jin. No es lo que piensan—

—Es que ni con tu esposa fuiste así— dice el vampiro que ahora sé es Jin

—No es lo que piensan. Y es mi ex esposa— dice lo último casi como un susurro

—De alfa a alfa, te digo que vas por un mal camino—

Bueno, no comprendo de qué hablan, yo solo me quedo viendo cómo desde que me pidió acercarme, el señor Min no ha dejado de tener aquellos ojos grises brillante.

—Miren, ustedes, aberraciones— señala a sus amigos —Encontré a Jimin en ese lugar horrible del que todas las criaturas hablan, donde puedes dejar que tu alma se pierda sin ser encontrada. Ahí estaba y me salvó de esa horrible muerte a la que ya, yo me había destinado. Algo me llevó a él. Y en cuanto lo toqué, vi todo los motivos para vivir. Luego no pude evitar sentir la necesidad de protección, bien saben que va en mi naturaleza, así que no me vengan con esas historias ancestrales del alfa destinado a un omega específico, porque bien sabemos que son cuentos de infantiles de enamorados—

El señor Min habla y habla como enojado, pero yo solo quiero ver sus ojos rodeados de un rojo brillante que le hace tener una mirada penetrante y oscura.

—Muy bien Yoongi, pero ve a verte en el espejo— dice Taehyung

Me arrastra con él, ha tomado mi mano con fuerza y por ello mi corazón da un brinco, uno muy fuerte que logra colorear mis mejillas de un tono rojo y a mi mirada gris. Controlo todo aquello porque siento que un calor indescriptible recorre mi cuerpo.