Nuevo secretario

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Jamás he necesitado una alarma, es como si mi cuerpo supiera que debe despertar y empezar el día. Y tampoco es que yo sea muy bueno con mi sueño, me encanta pasarme el tiempo que puedo dormido, aunque sea extraño gozar de ese placer.

Apenas pongo los pies en el suelo me encuentro con aquel cuerpecito. Está enroscado sobre la alfombra; una vez más; con las manos se cubre el rostro, como siempre.

Masajeo mi entrecejo, parece no comprender que por algo le dejo la cama. Pero ya llegará el momento en que entienda, espero, porque desde que empezó a quedarse conmigo hasta ahora no parece hacerlo.

—Bonito~ no duermas en el suelo, anda a dormir a la cama, ¿cuántas veces debo decirlo?—

Abre sus ojitos, son azules como el agua y en sus mejillas observo estrellitas blancas. Empiezo a comprender que cuando duerme estas se dibujan naturalmente de ese color.

—Buenos días, señor Min—

Me dice y se talla los ojitos. Yo me levanto, quiero un café bastante caliente, la sala no es precisamente un lugar cálido.

—Jimin, creo que hoy tendrás que quedarte en casa solo, ¿está bien?—

—No—

Me ha seguido, parece temblar por la temperatura, así que le preparo una bebida caliente también.

—No quiero exponerte mucho, además estaré muy ocupado—

—Siempre está ocupado— me dice emberrinchado, yo le regreso una mirada de desaprobación —Puedo ayudarle. Puedo ser su secretario—

—Bonito— le doy la taza negra y simple —Mi secretario es Hoseok. No necesitas hacer ese trabajo—

—Pero...— está enfriando el agua, gota a gota hace que la temperatura baje —No quiero estar así como un aprovechado, no soy eso... Yo quiero ayudar en algo—

Sonrío. Jamás pensaría de él eso, ¿por qué? No sé, es que su alma se siente pura.

—Bueno, dime, ¿qué quieres hacer?—

Pone su dedito índice en sus labios y alza la vista. Veo que cuando piensa o pone mucha concentración en algo sus ojitos se pintan de un rosa pálido, sus pestañas se blanquean y sus mejillas se vuelven casi blancas, es algo único.

—Solo... ¡Podría estar a su lado, llevarle cafecito o comidita, recordarle que debe tomar agua, cositas así! Soy bueno con eso—

Me río un poco de lo que me dice. Es como si me cuidara, como un niño.

—No se ría. Sé que no puedo hacer mucho por usted porque soy algo débil—

—Ya, ya. Está bien. Puedes venir conmigo y hacer ese trabajo—

—¡¿En serio?!—

Abre sus ojitos muy grandes. Veo el universo salpicado de verdes mezclados con azules en ellos. Lo adoro.

—Bien, pero te aseguro que será un trabajo muy cansado—

—Soy muy fuerte—

Lo dejo ahí para ir a arreglarme. En un rato debo volver a la realidad y atender mis asuntos.

Hoseok como siempre está cuando llego. Me entrega los informes por firmar. Me da un reporte global de la situación. Y finalmente pregunta por Jimin, no muy contento.

—Señor, si él sigue viniendo los rumores no van a detenerse—

El pequeño viste de una manera poco apropiada para la imagen de la empresa, pero no me importa, se ve de lo más lindo con su suéter grande y su pantalón negro ajustado.

Azul Iridiscente // yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora