Mi Dulce Omega (HopeV)

7

Cuando la fecha llegó sus notables ojeras se habían reducido, sus músculos estaban reapareciendo formando de nuevo su cuerpo y el alcohol había abandonado completamente su sangre, era un gran avance para él.

Salió de casa con un traje negro, misma que le prestó Yoongi para ese día y tomó un taxi para dirigirse a la mansión de Dong Kim. El señor Kim, un famoso antiguo empresario con millones de dólares en mano, aunque fuera un anciano, el viejo hacia negocios en cada respirar, sería alucinante proteger a una persona así para cualquiera.

Pero al llegar a la mansión no fue lo que creyó; filas larguísimas de varias personas eras verificadas una por una, para revisar sus datos personales entregados con anterioridad. Estuvo a punto de darse media vuelta e irse ante ese circo, pero regresó, apagando su malestar y su mente para poder avanzar en su vida. Se colocó en la fila esperando como todos los demás.

La tardada fila llegó a disminuirse hacia un beta, que más podría tratarse de un mayordomo de la casa por su vestimenta formal y pulcra.

—Eres Jung Hoseok. Alfa. 26 años. Conocimientos en artes marciales, primeros auxilios y ex agente especial. Interesante —sonrió mirándole con amabilidad —¿Es correcto?

No le causaba gracia que estuviera esperando su turno casi 3 horas —Si, así es —dijo manteniendo una postura dura y no cansada.

—Puede sentarse en la parte de adelante.

Agradecía que de la larga fila solo quedaran decenas y él estuviera entre ellos, se dio cuenta que era una dura competencia al observar varias personas con el rostro inexpresivo y cuerpos grandes, propios de un profesional en esa área. Él aún estaba recuperando su forma y sus habilidades, por lo que se sentía una hormiga a su lado, pensando que sería desechado en cualquier momento. Todos voltearon hacia el mayordomo, que salió con numerosas carpetas colocándolas en el centro, no perdió su sonrisa al verlos.

—Bien, felicidades por quedar en la primera ronda. Ustedes fueron los más capaces de acuerdo a su expediente y curriculum enviado. Me presento, soy Park Bogum, secretario de Dong Kim, mismo que guiará esta entrevista —hizo una reverencia antes de continuar —Ahora daremos la bienvenida a la segunda ronda individual, que sería la entrevista personal con el señor Kim, así que los llamaremos uno por uno —llamó al primero desapareciendo dentro de una sala.

Talló su cabeza en frustración y fastidio, llevaba esperando dos horas esas tardadas entrevistas, tenía hambre y solo había comido unas galletas que les dieron de cortesía, así como agua que estaba en el dispensador a su frente. Cerró los ojos tratando de aliviar la tensión, porque estaba temiendo no ser aceptado. De los rostros duros que entraban salían con una cara confundida e indescifrable, nadie decía nada, así que no tenía la menor idea de lo qué pasaba allí dentro.

—Jung Hoseok, puede pasar...

Abrió los ojos quitando la tensión, relajándose al caminar. Siguió al secretario que lucía un poco cansado en todo ese proceso, este lo guió a una puerta que podía ser una oficina. Cuando la puerta se abrió, observó las finas decoraciones de madera tallada, muebles costosos y un aroma a pasto verde que venía del anciano de cabellos blancos y sonrisa amigable sentado en su escritorio. Le dio una reverencia y este le indicó que se sentara en frente de él.

—Eres Jung Hoseok ¿Cierto?

—Así es, señor —se aclaró su seca garganta para poder hablar con comodidad a esa persona que podría contratarlo, se mantuvo relajado atento a lo que le preguntarían.

—Tienes buenas habilidades y eres un ex agente, es lo que requerimos —cerró la carpeta que le dio su secretario para mirarlo a los ojos —Tu aroma es peculiar. Aroma a café, es agradable—se tocó el mentón viendo a su secretario, confirmando algo que solo ellos sabían —Bueno, la pregunta para ti es ¿Si quisieras cambiar el mundo qué sería?