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'feliz, feliz, no cumpleaños, a ti, a ti.'














Sus ojos vieron a lo lejos a su hermoso chico, mientras se acercaba caminando con una gran sonrisa, JaeBum se dedicó a mirarlo, haciéndole una señal para que se acercara, pero no contó con que su amigo lo detuviese poniéndole un gorro de cumpleaños encima, haciendo que de inmediato frunciera el ceño, escuchando la voz ruidosa de YuGyeom cantarle aquella canción de felicitación, haciendo que se quedase en shock, nunca le había preguntado ello, tampoco pareció ser importante, pero ahora que estaba viendo al chico sonreír le pareció que era buena opción comenzar a crear un plan, porque no estaba seguro que una tarde relajada fuese buena idea, o que tuviesen sexo, no o bueno quizá como algo extra, pero era su novio y debía demostrar que estaba comprometido con el asunto, aunque estaba claro que aquella situación nunca la vio venir, la pequeña culpa e irresponsabilidad se apodero de él y pensó en correr de vuelta a buscar algo que comprarle, pero era demasiado tarde porque se habían visto el uno al otro y ahora Mark se había desecho del gorro y corría a brazos de su amado.

JaeBum sintió cuando lo abrazó por la espalda, sonrió cuando lo vio vigilar los costados y luego hundió su nariz en su abrigo.

-Tienes una manía por olerme.

-Me gusta como hueles.- afirmó.- quiero recordar tu aroma.- el menor se aferró más a su cuerpo, deleitándose del otro, añadiendo que podía sentir las vibraciones de la risa de su novio.

-¿Tienes planes para más tarde?- cuestionó el mayor.

-Mhm...- pareció pensarlo.- sólo ir a ver a Milo

-Perfecto.- JaeBum vio su oportunidad para tomar ventaja de aquello quizá en aquel lapso podía comprar un pequeño pastel o algo parecido y hacer una cena para dos en su casa.- Aparta tu tarde.

Mark se alejó de su posición y frunció el ceño ligeramente, pero relajándola inmediatamente, porque realmente no le importaba pasar todo el tiempo pegado a su lado.

Como últimamente se había vuelto costumbre miraron a los lados, advirtiendo que nadie viniese detrás o cerca de ellos, para tomarse las manos. A Mark le encantaba esa sensación que le proporcionaba, tan cálida, tan suave y a la vez firme.

Pronto tuvieron que separarse por sus horarios, Mark se concentró en sus clases, recordando la estúpida broma de YuGyeom con aquel gorro de cumpleaños, y su ruidosa voz cantando feliz cumpleaños, se notaba que realmente no tenía nada que hacer y agradeció que JaeBum no pensara que era su cumpleaños, sino de cualquier modo le hubiese preguntado ¿o no?

Sus clases eran aburridas, ahora las sentía así, claro, que no dejaba de poner atención, y trabajar, pero pensaba como idiota en estar a lado de su mayor, de pasar un buen rato juntos, aunque se podía conformar con las conversaciones en mensajes de textos que sostenían en las horas en que no estaban juntos, tal como ahora, JaeBum mandando imágenes al azar de si mismo, al final diciendo que estaba aburrido, a Mark le parecía lindo, y amaba cada que lo hacía, hasta el punto de tener un lugar específico para guardar cada una de sus fotos, se notaba claramente que sus clases habían terminado, y eso significaba que iba a verlo más tarde en su casa, porque no era lógico hacerlo esperar otras cuatro horas, cuando podía verlo más tarde y con mayor libertad, añadiendo al pequeño animal que ahora era de ambos, aunque podía notar cierta repelencia al animal sólo cuando quería molestar, pero no cabía duda que lo quería, al igual que él.

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Al llegar a la casa de su profesor, se detuvo a mirar al pequeño cachorro que estaba saltando de lado a lado, feliz de verlo, acariciándolo y preguntándole cosas que el pequeño perro respondía con ladridos. Escuchó la puerta principal ser abierta, junto con los pasos de su novio aproximándose.

-Deberías venir a verme primero a mi, yo también te extraño.- dijo con una sonrisa, haciendo sonreír al otro mientras negaba.

Se quedaron un rato con el cachorro, jugando y haciendo unas cuantas bromas, añadiendo un par de castos besos entre ellos. Al entrar a la casa, Mark se topó con lo que menos esperaba y eso era un pequeño pastel frente a sus ojos, junto con un sorpresa por parte de su mayor.

-Jae...-trató de hablar

-Yo sé, no es la gran cosa, pero prepare algo de comer, que espero te guste.

-JaeBum.

-Y si quieres que te regale algo, podemos verlo después...- continuó hablando.

-JaeBum...

-Realmente espero te guste.- agregó, colocando sobre su cabeza otro gorro de ese tipo, haciendo lucir adorable, pero causando que Tuan perdiese los estribos por no dejarlo hablar.

-¡JAEBUM!- gritó dejándolo perplejo, captando por fin su atención.- no es mi cumpleaños.- dijo por fin.

Su novio frunció el ceño.

-Pero...

-YuGyeom me hizo una broma en la mañana, no espere a que te lo tomaras en serio y pensé que me lo preguntarías.

-Entonces ¿no sirvió de nada esto?

-quizá sirva dentro de un mes.- se encogió de hombros.

Miró el pastel y la comida.

-Diablos.- dijo sintiéndose estúpido.

-Pero...- trató de animar el menor.- podemos festejar mi no cumpleaños.- habló de manera rápida haciendo que JaeBum se quedase callado.

-¿Eso incluye un no regalo?- cuestionó.

-Posiblemente.- respondió encogiéndose de hombros y mirándolo directamente a los ojos.

-¿Podemos pasar al regalo?- Mark ladeó el rostro, sin entender, pero luego sintiendo los labios de su novio sobre los suyos, al igual que sus manos recorriendo su torso sobre su camiseta, para luego interrumpir su privacidad y colarse debajo de esta, sintiendo la textura de su piel.

Finalmente pasando a la habitación del mayor, obteniendo una especie de regalo por su no cumpleaños, el cual no iba a dejarlo caminar adecuadamente la mañana siguiente.

[...]

engáñame; jjp; markbeom [reescribiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora