28

6.1K 1K 73
                                    

No hay golpe más fuerte que el de la lengua.
Cuando las palabras son más dolorosas que los puños.








— Ah~ ¿qué tal? ¿Cómo les va? — Jimin fue el primero en entrar a la sala. Se tiró en el sillón, al lado de Yoongi, que se corrió un poco.

— ¿Cómo sabías que vivíamos aquí? — preguntó el pelinegro.

— Lo averigüé.

— Sigues siendo el mismo acosador, ¿eh?

— No-oh, he mejorado. — guiñó

— ¿Por qué viniste?

— ¡Ah! — llevó su mano a la frente — Es que estaba algo mareado, ¿sabes, Taehyung?~

— ¿De verdad? — el peliverde se sentó a su lado. Yoongi los miraba de reojo.

— Sí, de hecho, iba justo a retirar una ropa de la lavandería, pero no creo que pueda llegar. —sacó un papel de su bolsillo, extendiéndoselo — Esta es la dirección, ¿crees que podrías retirarla por mí?

— Uhm — tomó la tarjeta y leyó la dirección — Por supuesto que sí, tú no te preocupes. Quedate aquí y volveré con la ropa, ¿quieres un poco de agua?

— Está bien con eso, Yoongi puede hacerse cargo por si necesitara otra cosa — sonrió de lado, pasando el brazo por sobre los hombros del pelinegro.

— ¿Perdón? No soy niñero.

— Yoongi, no seas así. Atiendelo — regañó y miró de nuevo el papel, no conocía mucho esa calle, pero se las arreglaría. Después de todo, Jimin siempre fue bueno con él, quería ayudarlo. — Ahora vuelvo. — tomó una chaqueta y salió.

— Entonces, Yoongi, ¿no vas a atenderme?

Yoongi se levantó fastidiado — ¿Qué fue eso, Jimin? ¿Por qué sacaste a Taehyung de casa?

— Tranquilo, es parte del plan.

— ¿Qué plan? ¿El de la historia cliché? — Jimin asintió — Taehyung dijo que ya dejara eso, ahora se va a fastidiar.

— Bueno, yo no sabía eso. No me lo dijiste — se levantó. Hasta ahora estaba tratando de hacer a un lado la manera agresiva en la que Yoongi le hablaba. — ¿Estás bien? Pareces algo alterado.

— Yo estoy bien, Jimin. Será mejor que te vayas.

Frunció el ceño — ¿Te hice algo? — sonó dolido.

Se tardó en contestar — Claro que no... — casi murmuró.

— ¿Y entonces? ¿Es mi imaginación o de repente me estás tratando como una mierda? — se acercó y Yoongi dio un paso atrás — O más bien, como una peste.

— No es eso.
Pero si te da la impresión, bien puedes irte.

Jimin lo observó. Rió corto y sin gracia — Está bien, Min. Llamaré a Taehyung y le diré que venga. — caminó hasta la puerta.

— ¿Eres un chico problemático? — preguntó de repente.

— ¿Disculpa?

— Escuché que... Metiste en problemas a tu ex novio y sus amigos.

— ¿¿Disculpa?? — preguntó aún más sacado, caminado hacia él. ¿En serio se atrevió a decirle eso?

— Sólo me preocupo porque no vengas a traer problemas aquí, ya sabes, por cómo te comportas y hablas de forma descarada, no me sorprendería que hayas causado algún que otro problema. — y otra vez, la lengua rápida de Yoongi habló sin ponerse a pensar si debía o no.

— ¿Eso te parece? — rió. — Tranquilo, trataré de que mis manías no les traigan problemas a ustedes, pedazo de cretino inmundo. — caminó a paso apresurado de nuevo a la puerta.

Yoongi movió sus dedos inquietos, estaba siendo un idiota por sólo un rumor — ¡Jimin! — llamó cuando el otro abrió la puerta.

Suspiró, tirando su cabeza hacia atrás, después lo miró — ¿Qué?

— Lo siento, no hiciste nada malo. — Jimin se alzó de hombros y volteó de nuevo para irse — No te vayas. — se detuvo — No quiero que te vayas.

— Pudrete.

Salió, aún con ojos llorosos.

Another Cliched Story?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora