Is This Love? ( Yoongi y T/N )

Capítulo 1

Han pasado dos años desde que mi vida cambió por completo.
Mi padre nunca pudo superar la traición de mi madre que terminó por abandonarnos para irse con un hombre adinerado.
Se hundió en el vicio del alcohol y terminó apostando todo y lo perdió, incluso a mí.
Me vendió a un hombre adinerado y digo vendió, porque sé que recibió una gran cantidad de dinero, aunque no se cuanto.

Y ahí comenzaron todos mis males, dejé la escuela, me he mudado 5 veces al menos porque seguramente este hombre es casado y solo trata de aparentar algo que no es, manteniendome en secreto.

Llevo unos dos meses viviendo en este departamento, es pequeño pero es suficiente para mi sola, él solo me visita cuando quiere satisfacer sus deseos sexuales.
No suelo salir tanto porque siento que me vigila, solo tengo una amiga, la chica que vive al frente de mi departamento.

*

- ¡Demonios! - Exclamé mientras abría el refrigerador - ya no hay leche.

Cerré de un portazo el refri y me dirigí a mi habitación para cambiarme la pijama.
Me puse un pantalón de mezclilla una blusa de tirantes, mi chamarra y mis tenís.
Salí de mi departamento y bajé.
Vivo en el segundo piso de un edificio de tres pisos.
Por suerte el Supermercado se encuentra del otro lado de la calle, no enfrente pero no tengo que caminar tanto.

Crucé la calle y entre al supermercado, me dirigí a la Zona de lacteos y tomé lo que necesitaba, pero al pasar por la zona de golosinas me detuve, había una en especial que me gusta mucho y era la última.

- ¡Que suerte!

Estiré la mano para tomarlas, pero al mismo tiempo alguien también hizo lo mismo.
Nuestras manos quedaron agarrando lo mismo.
Ambos nos miramos, por un momento dudé si debía soltarlo o aferrarme.

" yo lo vi primero "pensé.

Lo solté y ese chico hizo lo mismo, como si estuviéramos pensando lo mismo. La envoltura de golosinas cayó al piso.
El se agachó, la tomó y me la dió. Antes de irse me dedicó una sonrisa que hacía que se le cerraran los ojos.

"Que lindo es" pensé.

Llegué hasta la caja registradora y mientras hacía fila me di cuenta que ese chico estaba tras de mí esperando.
Llegó mi turno, estaba sacando dinero de mi cartera cuando mi celular empezó a sonar.

"Llamada de Kan"
- ¿Hola? - respondí.

- T/N, estoy llendo a tu departamento, tengo una sorpresa para tí.

Colgó la llamada.

Pagué rapido, tenía que llegar antes de que él llegara.
Salí rapido en cuanto me dieron el cambio.

- ¡Señorita! - escuché tras de mí.

Giré, era ese chico de antes, con mis golosinas en la mano.

Llegó hasta mí.

- Señorita se le olvidó esto.

- Puedes quedartelas - respondí, ya que lo que menos quería era perder tiempo hablando.

- Oh, ¿En cerio?

Asentí

- Gracias, mi nombre es Jimin, Park Jimin - estiró la mano. - Y acabo de mudarme a ese edificio - señaló el edificio de tres pisos que está frente al mio.

Estreché su mano.
- Mi nombre es T/N y vivo en ese edificio - señalé el mio.

-Perece que seremos vecinos - sonrió.

- Si, Bienvenido - sonreí.

Pero en eso vi tres autos negros acercándose, sabía de quien se trataba.

- Tengo que irme - hablé.

-Esta bien, seguro tienes cosas que hacer, no te quito más tu tiempo, gracias.

- No es nada - empecé a caminar hacia mi departamento, solo le agité la mano en señal de despedida, sin voltear atrás.

Subí a mi departamento lo más rápido que pude y me metí a la cocina para preparar mi desayuno.

La puerta se abrió y el olor a loción de aquel hombre se hizo notar, normalmente sus guardaespaldas se quedan afuera.
Escuché sus pasos acercarse mientras batía unos huevos.

- ¡Mi pequeña! - habló cerca mi oreja que ni cuenta me di cuando ya estaba tras de mí.

Empezó a besar mi cuello. Mi respiración comenzó a agitarse y mi corazón empezó a latir muy rapido, no por lo que pueda provocarme sino mas bien por el hecho de que tengo que soportar esto y solo fingir que está bien, cuando lo único que quiero es huir.

- Intento cocinar - hablé para ver si me dejaba por esta vez.

- Eso puede esperar, pero ahora yo estoy impaciente - apagó la estufa y siguió besando mi cuello.

Me sacó de la cocina y me dirigió hasta mi habitación, atravesando por la pequeña sala.

Cerró la puerta, giré y me empujó hacia la cama, caí acostada boca arriba.
Se quitó el saco y empezó a desabrocharse la camisa.

- ¡Desvistete! - me ordenó.

Me quité la chamarra con mucha lentitud, el se acercó hasta mí.
- Parece que necesitas ayuda con eso.

- ¡Yo puedo hacerlo sola! - hablé molesta.

Sin más, me saqué la blusa y el se abalanzó sobre mi,se las ingenió para sacarme el pantalón y los tenis. Solo estaba en ropa interior, él ya se había quitado la camisa y estaba por quitarse el pantalón.

Sacó un condón de su bolsa trasera y comenzó a quitarse el pantalón, encogí mis piernas como si eso fuera a salvarme.

- Vamos nena, no quiero ser malo contigo - Se puso encima de mí y empezó a besar mi cuello nuevamente, metió una mano por debajo para deshacerse de mi sostén.

- Esto estorba - lo lanzó por un lado. - Vamos relajarte, estas muy tensa.

De un jalón se deshizo de mis bragas, encogí mis piernas pero el me jaló para abrirlas.
Giré hacia un lado luego de darme cuenta del gran bulto que yacía dentro su boxer.

Solo quería que esto terminará pronto, siempre había creído que las personas solo debían entregarse por amor, pero no, algunas solo lo hacen por placer.
"Al diablo con eso" Ni siquiera sé, si tal cosa como el amor existe realmente.

Y sin previo aviso se introdujo dentro de mí.

- Eres mía, recuerda que solo eres mía, ningún otro hombre puede tocarte - habló cerca mi oído mientras me daba fuertes embestidas.

*Espero que ésta historia les guste,hasta pronto.