Capítulo 59

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Narra T/N.

Pasaron los primeros tres meses desde que nació mi bebé, el tiempo se había pasado tan rápido como si tuviera alas.
Yo ya me había acostumbrado a la vida que tenía en casa de Tae.
Nuestra relación se hizo más cercana a tal punto que ya lo consideraba como un amigo.

Él, todas las mañanas pasaba a despedirse del bebé antes de irse a su trabajo y al regresar siempre lo buscaba  para saludarlo.
Por otro lado parecía que el bebé se había acostumbrado a su voz porque en cuanto lo escuchaba empezaba a buscarlo con la mirada.

*


Era un domingo como cualquier otro, Aiko había salido temprano y Tae estaba en la casa descansando.

Terminé de bañar al bebé y lo puse en su cuna, dentro de mi habitación.
Escuché unos toques en la puerta y enseguida la voz de Tae pidiéndome permiso para pasar.
Lo dejé entrar y se acercó junto a mí, frente a la cuna para ver al bebé que aún no quería dormirse.

Empezamos a hablar sobre lo difícil que era hacerlo dormir mientras él le mostraba su osito de peluche.
Un oso gris pequeño que Tae le había comprado y que el bebé siempre tenía consigo.

Pero Tae le mostraba el peluche más con el fin de entretenerlo que de dormirlo y el bebé solo se reía dejando ver sus rosadas encias.

Pasaron unos minutos y empezó a bostezar, empecé a darle palmaditas en su pecho y a los pocos minutos se quedó completamente dormido.

Tae aún seguía a mi lado y de pronto sentí que me estaba observando detenidamente, giré hacia él con el fin de que apartara su vista pero no lo hizo.
Me sentí nerviosa y no supe que hacer, giré la vista hacia el bebé intentando evadirlo.

—T/N... —escuché que dijo mi nombre y giré la vista hacia él nuevamente— quiero decirte algo muy importante.

Al escuchar eso empecé a asustarme, creí que iba a regañarme o decirme que había hecho algo que no estaba bien.
Esperé que continuara pero en vez de continuar con lo que estaba diciendo empezó a acercar su cara de manera lenta hacia la mía.

Mi nerviosismo aumento, me di cuenta que estaba buscando mis labios y no supe que hacer, no fui capaz de detenerlo.
No supe por qué razón pero solo deje que continuara, era como si estuviera deseando que eso pasara.

Sus labios llegaron a los míos y se conectaron en un beso corto que pronto se convirtió en un beso largo y profundo.

No podía negar que él me gustaba y cerré mis ojos para disfrutarlo.
Era un gran hombre y estar con él me hacía sentír tranquila y protegida.

Un vago recuerdo se apoderó de mi mente y de pronto sentí el deseo de frenar todo eso, me separé de él de inmediato.

Me sentía confundida, no sabía lo que estaba haciendo.
Tal vez no estaba preparada para empezar una relación o simplemente tenía miedo de empezarla.

Sentía que faltaba ese revoloteo en mi estomago que hacia que todo fuera mágico, ese impulso que se da cuando quieres arriesgarlo todo por alguien, o simplemente era el recuerdo de Yoongi el que no me permitía seguir con mi vida, porque a pesar de todo, mi mente siempre me hacía volver hacia a él.

—Perdón... —Me disculpé— yo no me siento preparada para empezar una relación... perdón.

Tae agachó la cabeza y respondió.

—No pasa nada, perdóname tú a mí por tomar ese atrevimiento, solo quería decirte que me gustas pero no sabía como decírtelo, pero no pasa nada si no sientes lo mismo, no te preocupes, está bien.

Se notaba en sus palabras que más que estar arrepentido, estaba dolido y avergonzado o tal vez desepcionado.

—No es que no me gustes —traté de justificarme—, es solo que... no me siento capaz de llevar una relacion en este momento...

—Está bien. —Levantó la vista—. No tienes que darme explicaciones si no te gusto.

—No es eso. —Volví a justificarme—. Es solo que... por ahora no me siento tan bien como para tener una relación, por ahora solo quiero dedicarme a mi hijo.

—Si es por el bebé entonces lo entiendo. —Su rostro cambió a un poco más relajado y tranquilo—. Pero solo quiero decirte que voy a estar esperando el tiempo que necesites, hasta que decidas aceptarme o hasta que me digas que te has enamorado de otro hombre.

Me dió una tierna sonrisa y luego se dirigió a la puerta para luego salir de mi habitación.

Lo vi irse y luego me senté en la cama para pensar en todo lo que había pasado y en lo que había dicho.

Tae era un buen hombre y se merecía alguien que lo amara de verdad, pero yo no sabía si podría ser esa persona.

Me era muy difícil pensar que podría ser yo, porque en mi corazón todavía existía otro.

*


Pasaron unos días y Tae se había ido a trabajar, Aiko se había ido a hacer las compras y como yo no podía ser de gran ayuda con al bebé, me había quedado a hacer la limpieza.

El teléfono de la casa empezó a sonar y fui a responder.
Era Tae diciéndome que había olvidado un folder con unos papeles muy importantes que necesitaba para dar una junta.

Me dijo que le dijera a Aiko que se los llevara en cuanto llegara ya que el día se veía bastante nublado y no quería que el bebé se enfermara si empezaba a llover.

Esperé por unos minutos y al ver que Aiko no volvía tomé a mi bebé y lo abrigué bien, tomé el folder con los papeles y mi bolsa de mano para salir.

Y esperaba no tardarme mucho porque no había encontrado el paraguas por ningún lado.

Salí de la casa y tomé un taxi, después de un rato llegué a la empresa.
Después de bajar del taxi me quedé parada viendo a través del cristal del edificio.

Por lo menos el primer piso se veía como un lugar amplio y vacío.
En la puerta había un guardia de seguridad y por la parte de adentro estaba la recepción que era atendida por una señorita.
Y más al fondo se notaba una puerta de ascensor.

Me dirigí a la puerta y entré sin problemas, me acerqué a la recepción y hablé con la señorita para decirle que llevaba unos papeles para Kim Taehyung.

Traté de comunicarme en inglés para que pudiera responderme en el mismo idioma.
Ella hizo una llamada por teléfono y luego se dirigió a mí diciéndome que lo esperara.

Me quedé parada a un lado de su escritorio y esperé mientras obsevaba lo que ella hacía.

Me di cuenta que había un paraguas enrollado sobre su escritorio y pensé que podía pedírselo prestado si era necesario.

Pasaron unos minutos y ya quería irme, el bebé estaba durmiendo en mis brazos y ya me había cansado.

El sonido del asesor se escuchó y giré mi vista para ver si era Tae quien salía.

La puerta se abrió y mi cuerpo se tensó.
Mis pupilas se dilataron, mi cuerpo se volvió frágil como gelatina, mi corazón empezó a latir tan rápido que de no ser por mi bebé seguramente iba a desmayarme.

Era Yoongi quien iba saliendo del ascensor.
Tenía la vista perdida en el piso y vestía un pantalón negro con una camisa blanca.

Tragué saliva, no estaba preparada para algo como eso.
Él siguió caminado sin verme y luego levantó la vista.

Se detuvo, su cara se llenó de asombro, sus ojos se abrieron tanto como los míos, su rostro se veía tan pálido como si hubiera visto un fantasma.

Los latidos de mi corazón empezaron a incrementarse, nos teníamos frente a frente, a solo unos metros de distancia.

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Ahora si, ya casi llega el final.

Is This Love? ( Yoongi y T/N )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora