Is This Love? ( Yoongi y T/N )

Capítulo 53

Narra Yoongi.

Después de llegar a Japón me reuní con mi futuro socio y pasé unos días como turista, visitando algunos lugares que Merry me llevó a conocer.

*

Me encontraba en mi departamento, cambiándome la ropa para reunirme con Merry.
Ella y yo habíamos acordado reunirnos para ir a cenar a un restaurante.

Acepté salir solo porque el restaurante se encontraba cerca del hotel donde me estaba hospedando.

Faltaban solo unos minutos para reunirnos y yo estaba casi listo.

Empecé a sacar algunas cosas de mi maleta y me encontré con algo.
Era la cajita que tenía el anillo de compromiso.
La abrí y observé el anillo.

No recordaba cómo lo había empacado.
Solo sabía que tenía que devolverlo, no quería seguir teniéndolo conmigo.

El teléfono de la habitación empezó a sonar y guardé la cajita en la bolsa de mi pantalón para ir a responder.

Tomé el teléfono y respondí.
Era una llamada desde la recepción del hotel, para decirme que una chica estaba esperándome.
Y al preguntar por su nombre dieron que era Merry.

Colgué la llamada y me puse el saco.
Salí de la habitación y bajé hasta la recepción para encontrarme con Merry.

Nos dirigimos al restsurante y entramos.

Los minutos pasaron y después de llevar un rato, ella se puso de pie y se fue al baño.

Me quedé sólo por unos minutos, y esos minutos bastaron para que me hundiera en mis recuerdos.

Recordé aquella noche en el restaurante, cuando le propuse matrimonio a T/N.

Saqué la cajita y la abrí.
Toqué el anillo y sonreí al recordar muchas cosas.

Muchas cosas de ella.
Su forma de ser, su sonrisa. Todas esas cosas que habían conseguido enamorarme.

Suspiré sabiendo que tenía que ponerle fin a todo eso.
Tenía que aceptar que lo nuestro solo había sido pasajero.
A estas alturas, seguramente ella ya se habría casado, o tal vez estaría en su luna de miel.

Tenía que deshacerme de ese anillo y de ese arete para poder seguir con mi vida.

Tenía que renunciar a ella para siempre.

Giré a un lado y vi que Merry ya se estaba acercando.
Guardé la cajita para que no la viera y esperé a que llegara.

Llegó y se sentó.
Sonreí tratando de fingir que todo estaba bien conmigo.
Y ahora que estábamos juntos, quería agradecerle por haber estado siempre conmigo.

Tomé su mano y ella me observó.

—Merry, solo quiero agradecerte por estar siempre conmigo, por no haberme dejado y por tratar de ayudarme siempre.

—Sabes que siempre puedes contar conmigo —respondió viéndome a los ojos—, yo te aprecio mucho y me gustaría que... —bajó la mirada y volvió a verme— intentaras verme de otra manera.

Suspiré con pesadez, pues para mí era difícil decirle lo que en realidad sentía, no era fácil decirle la verdad sin lastimarla.

—Merry... yo también te aprecio mucho —agaché la mirada y volví a verla— pero siento que no podría verte de otra manera que como una amiga.