Entre los colmillos de los Bartholy (IV). Helena.

Capítulo 38 - Merienda

Nik nos ofrece cenar con él, pero Eiden y Drogo se quedan fuera para vigilar y avisar. Tienen una capa protectora que los protege y oculta su olor. Estamos cenando cuando me avisa Drogo. Y enseguida vamos hacia allí. Erik y yo también tenemos oculto nuestro olor. Llegamos y vemos un grupo de 3.

_Os conozco... Vosotros teníais tratos con mi padre.

_Que sorpresa, Drogo Bartholy... Lo siento, pero este coto de caza es nuestro, tendrás que buscarte otro...

_¿Qué son?

_Son una mezcla de demonio y vampiro.

_Bueno, bueno... Quién es esa preciosidad...

_La que te va a partir la cara como no os vayáis.

_Que carácter... Ven... veamos si sigues teniendo esos humos cuando te dé una lección... _dice sacando sus colmillos.

Drogo, Eiden y Erik junto a Nik los atacan, pero les cuesta bastante, son muy fuertes. Entonces intervengo yo, y me meto en sus mentes, creándoles un gran dolor e inmovilizándolos.

_Vamos, interróguenlos.

Eiden se presta voluntario. Empieza a hacerles preguntas, pero no responden.

_Entremos en sus mentes, no pueden resistirse, miremos uno cada uno y acabemos con ellos.

Nos metemos en sus mentes, buscamos toda la información posible, hasta que ya no hay nada más interesante,y salimos de ellos. Luego creo fuego fatuo y los hago arder, esto acabará con ambas naturalezas.

_Nik, ya no tienes de que preocuparos, estaban solos. Sólo os habian cogido como su buffet. Ahora tenemos que irnos.

_Muchas gracias por todo... ¿Cómo podemos agradecéroslo?

_No metiéndote con ningún vampiro, lobo o bruja de nuestros territorios.

_Descuida, así lo haremos.

Todos vamos a la mansión, para contar lo ocurrido y mostrar la información obtenida. Al final llegamos a la conclusión de que esos demonios buscaban la alianza de Conor, pero él como siempre, no toma partido con nadie. Lo que me preocupa es que ellos eran sirvientes de alguien, pero no sabemos de quién.

Paso la noche con Erik, quien no para de quejarse como nos trató la manada de Nik. Dicen que son muy débiles, y que les avergüenza tener lobos así cerca. Tras eso, me hace el amor de forma incansable, últimamente con el celo está más activo y celoso que de costumbre.

Al día siguiente paso las clases sin mayor importancia, pero hoy no me quedo a estudiar con Marco, ya que tengo la merienda con su madre y Erik me llevará a casa para cambiarme.

_Hola mi amor.

_Hola cariño.

_¿Estás segura que quieres ir con la loca esa y sus amigas? Lo mismo está la mujer de Drácula... _y ambos estallamos en una carcajada.

_No seas malo Erik... Además, ¿qué pueden hacer contra nosotras?

_Tienes razón...

En esto que pasa Leo por allí con sus amigos, y pasa por mi lado.

_Hasta esta tarde... Rubita... _me dice oliéndome al pasar.

Erik no se lo piensa y le da un puñetazo que le parte la nariz. Y suerte para él que estamos con mucha gente y solo le da uno...

_La próxima vez mantén tu asquerosa  nariz fuera de ella... _Dice Erik enfadado.

_Veo que el chucho está irritable... Entonces aprovecharé cuando no estés para olerla de cerca y tocar su piel...

_Quién te crees que eres para hablarme así... _me acerco a él y le fracturo la muñeca. _Te he dicho muchas veces que me respetes, y por si no te ha quedado claro, nunca me tendrás...

_¿Qué pasa aquí? _dice Marco que se acerca corriendo.

_Enseña a tu hermano a no meter las narices en donde no le llaman... _gruñe Erik.

Marco me mira con una sonrisa de disculpa y nos vamos. Llegamos a casa y tras comer, vamos a mi cuarto a decidir que me pongo.

_¿Puedo elegir yo?

_Inténtalo... Pero seguro que no me va a gustar...

Me saca varios modelos pero son de lo más tapados posibles.

_Espera, ya sé...

Me empiezo a desnuda delante de él, y saco ropa interior de encaje blanco. Según me voy quitando la ropa sus ojos cambian y se ven llenos de deseo, y cuando me giro para quitarme el sujetador, aparece detrás de mi y me pega a la pared mientras me atrapa con su cuerpo.

_Helena...

Dice mientras acaricia mi cuerpo y besa mi cuello, puedo notar su excitación. Yo sello la habitación como Eneas me sugirió.

_Voy a hacerte mía... Y vas a llevar mi olor para que ese asqueroso vampiro sepa a quién perteneces...

_Se te olvida que no soy un objeto y no pertenezco a nadie...

_Me perteneces a mí...

_Claro que no... _eso lo excita más, lo noto en sus caricias.

_Tendré que demostrártelo entonces....

Tal y como me tiene, arranca mis bragas y bajando su pantalón me hace suya... Menos mal que no pueden escucharnos porque no somos precisamente silenciosos...  Me hace el amor fuertemente, mordiéndome,  atrapada entre su cuerpo y la pared gimo de placer.

_Sí... Mi Luna... Eres mía... Sólo mía...

_Y tu eres mío... Lobito hermoso...

Tras acabar, me abraza y noto su preocupación.

_Mi amor... Si me hace algo lo descuartizo... Tranquilo...

_Te quiero...

Me visto con un mono blanco muy elegante y me pongo mis tacones beige. Me termino de peinar y maquillar y salgo en busca de mi madre. No se oye nada, seguro que está con Peter... En el salón escucho a Eva y Sarah, y voy a abrazarlas.

Una vez estamos todas, vamos en el coche de Sarah. Llegamos y hay varios coches aparcados fuera de lo común. Entramos y Bianca nos recibe y lleva a un salón. Hay copas de sangre para Eva y para mí, y un té para mamá y Sarah.

_Muchas gracias por el detalle, Bianca _dice mamá.

_No hay de qué, quiero presentaros a unas amigas.

Nos presenta a 3 vampiras que tienen pinta de ser muy estiradas, pero que luego resultan muy entretenidas. Sólo una de ellas es Original. Pasamos una tarde agradable, hasta que escucho que el grupo empieza a ensayar.

_Helena, si quieres bajar, estás disculpada.

_Gracias, pero me parece descortés.

_No te preocupes cariño, nosotras ya nos vamos a ir. Ha sido un placer conoceros.

_Igualmente _dice Sarah.

La verdad es que todas nos lo hemos pasado muy bien.

_Eva, ¿quieres quedarte al ensayo?

_Claro, si no es molestia.

_Para nada...