Camino a la Pasión [MAITINO]

Capítulo I

Nota inicial: esta es una historia que intenta adaptar la historia de Maite y Camino en Acacias 38 a la época actual. Por lo tanto sufrirá algunas alteraciones a nivel general por el hecho de que hay cosas que a este punto del tiempo y del sitio geográfico dónde se desarrolla ya no son un problema como ocurría en la época original de la historia. Pero tendrá sus cosillas.

Antes empezar decir varias cosillas. Uno, no soy experta en arte, pero intento ser convincente (creo) y me estoy documentando un poco para no liarla, pero si no lo logro tenerme piedad, porfa. Dos: intentaré ir introduciendo a los demás personajes de Acacias en la medida que pueda y no sea tan forzado porque mi intención es que sea un historia sobre ellas y su entorno, pero si puedo voy a introducir a más. Tres, el titulo re novela, pero me molaba porque Acacias es una telenovela, ¿no? Ademas, tenía sentido, ya verán.

Ah, no tengo ni la menor idea si alguien estaba escribiendo algo parecido en plan adaptación porque no he leído ningún fanfic todavía. Normalmente, cuando escribo sobre alguna OTP suelo no leer hasta no terminar que es lo que ha pasado en este caso. Así que si esta idea ya existe (al menos a nivel general) no tengo idea, pero yo le daré mi propia perspectiva. Denle una oportunidad.

Agradecimiento a @YaSan23 por la portada. Y sí, las imágenes no son de Camino y Maite porque no veía cómo "convencer" a nadie de que estuvieran en 2019, por eso es que las imágenes son de las actrices Aria e Ylenia. Lo más probable es que no se enteren, pero, porque es lo que corresponde, digo "perdón y permiso" (juro que estoy poniendo mi mejor voz de pobrecita yo xD).

Disclaimer: Acacias 38 es una creación de Aurora Guerra y Televisión Española.

En fin. Vamos a por ello.

Capítulo 1

El director de la Escuela Superior de Arte más prestigiosa de Madrid se sentó frente a su primera cita de la mañana. El 2019 traería cosas nuevas para su escuela. Sonrió fascinado al poseer por primera vez la atención de la mujer. Ella había volado desde París el día anterior, pero no se notaba ni por asomo una gota de cansancio en su rostro. El ordenador sobre su mesa mostraba las 8:30 cuando comenzaron a hablar.

-Señorita Zaldúa - dijo con voz potente y la mujer enfrente de él inclinó la cabeza como estudiando su entusiasmo, por lo que sosegó su voz - no sabe el honor que significa recibirla en nuestra casa de estudios.

-El honor es mío, Señor Cortés - respondió la mujer antes de dar un largo suspiro - la fama de su institución le preceden, he tenido el placer de contactar con algunos de los artistas que han surgido de esta academia y déjeme decirle que estoy entusiasmada con la idea de formar parte de su proyecto.

Alonso Cortés procedía de una casa de nobles siendo descendiente directo de un marqués de incipiente poder hacia principios del siglo, título nobiliario del que nunca ostentaba. Hoy se había hecho cargo de la única herencia que había recibido de esa época, una afamada escuela de arte que disponía de numerosas disciplinas. Era privada y requería no sólo de mucho talento para ingresar, sino también de dinero, pero de allí también surgían verdaderas semillas para la cultura y el arte de España. El hombre se sentía muy orgulloso de su pericia como director, docente y conocedor de arte. Ahora sólo quedaban él y su nieto, así que debía asegurarse de que el legado continuara a salvo.

Llevaba años detrás de Maite Zaldúa. La artista era evasiva y sólo había instruido en La Sorbona de París. Pero Alonso era paciente y pertinaz, y un amigo cercano de su tío. Recientemente, este le había explicado que era el mejor momento para reclutar a su sobrina y le había contado una confidencia que debía guardarse sólo para él. El hombre observó a la joven mujer, estaba al inicio de los 33 y era preciosa. El cabello oscuro y largo que caía libremente sobre sus hombros, su forma de vestir era elegante, pero casual. El mensaje era claro, había un aire liberal en su postura y mucho más empoderamiento. También supo que cualquiera con cierta sensibilidad podría notar la sombra de melancolía tras su mirada.