Capítulo 66: La promesa cumplida

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La vida sigue.

Apenas recuerdo el trayecto de vuelta en el avión privado. Lo pasé casi por completo en una duermevela. Regresamos a Madrid y esperamos a Dari en el aeropuerto. Nuestro en cuento fue un revuelo de abrazos. Yo terminé llorando de alegría y llegué a levantarlo del suelo a pesar del estirón que ha dado.

Regresar a mi habitación fue como un bendito sueño. El retorno a la realidad común y corriente fue confuso al principio, pero lo agradecí de todo corazón.

Estuve unas semanas simplemente recuperándome en casa, envuelta en tranquilidad, pero no tardé en ponerme las pilas. Para no levantar demasiadas preguntas, tuve que cambiarme de escuela. Tengo que repetir curso y recuperar los dos años perdidos, pero después de todas las barbaridades que he vivido, ésta parece una prueba fácil en comparación. Estudio todo lo que puedo, en casa y en instituto, pero tampoco me privo de disfrutar mi tiempo libre en las vacaciones.

He perdido todos mis poderes. Nada de viajes astrales, ni portales, ni capacidad para entender todos los idiomas, ni conexión mental, ni poder ver auras angélicas ni demoníacas. Ni si quiera he vuelto a ver fantasmas. Ahora soy una chica normal y me siento afortunada por ello.

Las muertes por el virus rojo cesan y el mundo se va recuperando, aunque la humanidad va a tardar mucho en hacerlo como antes. Diversos países han sufrido crisis económicas e incluso disputas internas y externas, algunos gobiernos han tenido que reimplantar medidas de seguridad e invertir más dinero en la medicina y la ciencia para que si algún día volvería a ocurrir un desastre así, estén mejor preparados. Hay muchos grupos de ayuda social en activo. Y bastantes ángeles han tenido que mediar de por medio haciéndose pasar por humanos en altos cargos para que los problemas y disputas no fueran a más, pero por fortuna parece que lo han conseguido.

Puede que os resulte increíble, pero ningún humano ajeno a los nuestros se enteró de nada relacionado con lo que hicieron Abadón y los Vigilantes. Hicieron un buen trabajo con el escudo que aisló la batalla y la volvió invisible hasta a la visión de los satélites. El eclipse fue uno más para todos y nadie se enteró de la Unión. Claro que muchos ángeles y demonios tuvieron que cerciorarse de cambiar algunos recuerdos o engañar a los humanos con mentiras eficaces en ciertos asuntos menores que aparentemente no tenían explicación lógica para ellos. Los demonios poderosos, especialmente Lilith, incluyeron mucho en que esas mentiras se extendieran y fueran lo suficientemente convincentes. Quizás, como mucho, puede que se haya formado algún grupo conspiranoico de teorías de alienígenas o místicas, pero de esos ya teníamos antes a montones, así que no se toman en importancia.

La normalidad vuelve a la sociedad a un ritmo lento pero continuo, aunque sé que tardará décadas en estabilizarse. Y muy probablemente bastantes siglos en restaurar el número de humanos que éramos antes, lo cual por mucho que nos pese, es un alivio para el resto de las criaturas que pueblan el mundo, y también una buena oportunidad para que gran parte de esa restauración se obre a manos del Grupo de la Recreación, con humanos con mayor sangre angélica.

En cuanto a qué ha sido de los Vigilantes, Lucifer ya se ha encargado de capturar y encerrar a los que lucharon en su contra en la Guerra, y nadie se ha atrevido a llevarle la contraria. No sé si se mostrará algo más indulgente con ellos de lo que lo fue en el pasado o si será lo contrario, pero no hay nada que yo pueda hacer al respecto, y tampoco lo siento por ellos. Aparte de eso, apenas sé nada de Lucifer, mi padre me comentó que había vuelto a su castillo en Escocia, aunque también oyó rumores de que antes de eso estuvo un tiempo ausente, en una isla de indonesia. Yo sospecho en cuál y por qué estuvo allí, pero no digo palabra, no es asunto de nadie, las memorias que compartió con Luzbel son cosa suya.

Dos velas para el diablo 2: Alfa y OmegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora