Eijirou le estaba pidiendo autorización a su hermano para que le permitiera tener una relación oficial con Denki, pero Katsuki no lo tomó muy bien, y en medio de esa conversación la persona menos indicada apareció de repente.
Katsuki tenía a Kirishima por el cuello y cuando Kaminari apareció tiró a su hermano al suelo para acercarse al aterrado omega.
– ¡No debiste venir, Denki! ¡Sal de aquí! –Kirishima al ver cómo Katsuki se le acercaba temió lo peor.
Denki estaba tan aterrado que quería salir volando por una ventana, pero su cuerpo no respondía. Ver a ese imponente alfa aproximándose hacia que sus piernas temblaran como gelatina.
–Con que este es el omega con el quieres tener una relación –Katsuki ya estaba frente a él y desde su perspectiva no era más que un pequeño conejo asustado–. Tuviste la osadía de enamorarte de tu adorno.
– ¡Él no es un adorno! –Sin pensarlo dos veces Eijirou se colocó de pie dispuesto a desafiar a su hermano–. Él es Kaminari Denki, ¡Mi omega!
Katsuki estaba sorprendido al ver su reacción. Por una parte se sentía orgulloso, pero por otra estaba muy enojado.
– ¡No dejaré que le hagas daño! –Kirishima había empuñado sus manos colocándose en posición para pelear.
– ¿Te atreves a desafiarme? –En un instante Katsuki apareció delante de él tomándolo por sorpresa, luego le dio un fuerte golpe en el estómago que lo lanzó contra un librero que estaba cerca del horrorizado omega.
– ¡Eiji! –Al ver la fuerza de ese golpe y como lo había mandado a volar, pensó que todos sus huesos estaban rotos. Denki quería correr hacia él, pero el miedo había invadido todo su cuerpo y tanto era este que pensaba que si hacia el más mínimo movimiento Katsuki lo rebanaría.
Con dificultad Eijiro se puso de pie y se acerca a Denki coleándose delante de él para protegerlo. Al ver la mirada amenazante de Bakugou vuelve a ponerse en posición de lucha asombrándolo más.
Katsuki estaba sumamente sorprendido, Eijirou estaba completamente dispuesto a desafiarlo y ese era un comportamiento que nunca había visto en él durante todos los años que han vivido juntos.
– ¿Eiji, estás bien? –Kaminari estaba aferrado a su espalda, con su alfa delante suyo estando dispuesto a protegerlo no quería desprenderse de él.
–E-Estoy bien, quédate conmigo y no te separes –Eijirou estaba muy adolorido–. Te protegeré, cueste lo que cueste.
–P-Pero estas herido. Si sigues peleando te matará.
–Peleo por ti, peleo porque quiero estar contigo, porque te amo y no dejaré que nada malo te pase. Además, todavía hay postres que no te he preparado aún.
–Eiji...
–Pero que tierno –habló Katsuki sarcásticamente–. Veo que aún piensas desafiarme. ¿Qué crees que pasará contigo ahora? O mejor dicho, ¿Qué crees que va a pasar con ustedes ahora?
Kaminari se aferraba con fuerza a la espalda de su alfa, sabía que cualquier cosa que Bakugou les hiciera sería una total crueldad. Kirishima buscaba una forma de sacarlo de ahí, pero no había nada que pudiera hacer, sabía que si intentaba algo sería interceptado por su hermano y ambos estarían a su merced.
Pero por más que pensaba no hallaba la forma de garantizar la supervivencia de su omega, no sabía cómo sacarlo de ahí sin que saliera lastimado. Se estaba quedando sin opciones y comenzaba a desesperarse. Luego de ver la expresión de su hermano lo supo.
Katsuki estaba hirviendo en ira, sus colmillos sobresalían y sus ojos rubís brillaban con tanta intensidad como si una flama escarlata saliera de ellos. Al ver su enojo claramente reflejado en su rostro supo que no había escapatoria. Pero aún así no se iba a rendir sin pelear.
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Fantasía de un Soberano [Katsudeku-Omegaverse] En Edición
FanfictionBakugou Katsuki, rey de Mytitur, ostenta el liderazgo sobre el reino más prominente y avanzado del continente. Su dominio se destaca en todos los aspectos, desde la magia y la arquitectura hasta las armas, consolidándolo como una superpotencia. El r...