Fantasía de un Soberano [Katsudeku-Omegaverse] En Edición

Cap 32: El Temor del Pasado

A la mañana siguiente cuando el sol entraba a través de las ventanas y se podía escuchar el canto de las aves, Izuku despertó al lado de su alfa. Aún podía sentir como sus manos recorrían todo su cuerpo enseñándole cosas que desconocía, su mirada estaba perdida en el techo mientras recordaba todo lo que hiso anoche en la tina.

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Katsuki se había desnudado delante de Izuku mostrándole su gran virilidad, finalmente pudo confirmar la duda que se había formulado hace días.

Los alfas son superdotados.

No podía apartar la vista de aquel escultural cuerpo acercándose él y cuando Kacchan estuvo a punto de entrar en la tina se detuvo un momento para que Izuku lo contemplara aún más de cerca.

–Todo esto es tuyo.

– ¿M-Mío?

–Todo mi cuerpo y mi ser te pertenece y podrás tomar de mí cuando tú quieras.

–K-Kacchan... no digas esas cosas.

–Quiero demostrarte que cada palabra que te dije es cierta.

Dicho eso entró en la tina quedando frente al pecoso, se sentía muy orgulloso de su cuerpo al ver cómo Izuku no apartaba la mirada de él.

–No te quedes ahí mirando, ven –con algo de timidez el peliverde se acercó a él con sus mejillas completamente sonrojadas, y apenas Katsuki lo tuvo a su alcance lo tomó de la cintura y lo sentó entre sus piernas.

Izuku se sobresalto al sentir el miembro del alfa en su desnudo trasero, no podía describir como se sentía realmente, pero lo que si sabía era que tenía a todo un alfa a su disposición y solamente para él. Su instinto de omega se hiso presente haciendo que el pecoso deseara más de él.

Katsuki no hizo nada, sabía que Izuku estaba ansioso y nervioso por lo mucho que temblaba. Así que comenzó a masajear su espalda para que empezara a relajarse.

–Relájate, no voy a comerte... aún.

Sentir esas manos gruesas y ásperas recorrer su espalda, masajeando sus músculos, liberando su tensión, hiso que finalmente pudiera relajarse y gracias a eso sentía su cuerpo más liviano. Estando en ese punto ya no tenía espacio para la vergüenza, así que comenzó a mover sus caderas sintiendo como el miembro del alfa recorría su trasero.

La sensación era indescriptible, sin duda alguna la segunda vez fue mucho mejor que la primera y más cuando ambos estaban desnudos debajo del agua.

–Eso es, Deku, no te detengas.

Y él no tenía pensado hacerlo, cuando sentía el miembro del alfa agrandarse era cuando más se movía. Katsuki comenzó a besar su cuello a la vez que deslizaba sus manos por el vientre del peliverde hasta llegar a su entrepierna.

Izuku quedó impactado ante la nueva sensación, que Katsuki tocara sus partes con tanta delicadeza le excitaba y no te entendía porqué. Era tan inocente. Pero lo que si sabía era que le encantaba.

Bakugou comenzó a masturbarlo bajo el agua a la vez que le daba mordidas en el cuello, estaba feliz porque finalmente hacia lo que siempre había querido hacer con el omega desde un principio. Izuku apoyo su espalda en el pecho del alfa y con sus brazos atrajo su cabeza para que siguiera mordiendo su cuello.

Él no sabía lo que hacía, había perdido todo control de sí ante el nuevo placer que estaba experimentando. Lo único que quería era a ese alfa quien no paró de besar su cuello hasta llegar a su rostro, luego tomó al omega del mentón y cuando sus miradas estuvieron conectadas, cuando sus alientos comenzaron a mezclarse y el deseo se hiso más fuerte, unieron sus labios en un largo y profundo beso.