Realidad.

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Maia trató de no pensar mucho en la decisión que tenía entre manos, y trato de evitar pensar en Ashton lo más posible. Solo sostuvo la mano de Jack, incluso cuando un ruido poco habitual inundó la habitación.

Eran oficiales de policía. 

La reacción que debería haber tenido hubiese sido pánico y un poco de miedo, pero se levanto de la silla y los miro fulminantemente. 

― ¿Podrían ser más silenciosos por favor? ― siseó con toda la rabia que la poca consideración de los uniformados le habían provocado. 

― Disculpe señorita, pero aquí las órdenes las damos nosotros. 

― ¿Eso dice su general?

― Mi general soy yo, así que no tengo demasiado problema ― anunció el hombre mayor y de bigote espeso ― ¿Es usted algún familiar?

― Soy su novia ― mintió. 

― Bueno señorita, tenemos una acusación de violación y secuestro en contra de su novio. 

― ¿Y cuándo ocurrió este supuesto atentado? ― la sangre había abandonado su rostro, y la palidez mostraba el impacto que las palabras habían provocado en ella. 

― Ayer por la noche...

― ¿Me está hablando en serio? ― el desprecio de su voz no paso desapercibido para nadie. 

― ¿Me ve cara de estar de broma? ― preguntó el mismo oficial del bigote. 

― No, pero es imposible que aquello ocurriera, Jack ha estado hospitalizado desde ayer, y le puedo asegurar que de esta camilla no se ha movido. 

― Bueno, esto ― al hombre del bigote el rubor se le extendía desde el cuello hasta la frente, e incluso en las entradas, estaba de un color rojo imposible ― Discúlpenos. 

― Adelante. ― dijo haciendo un gesto burlón hacía la puerta, una vez que estos lo hicieron corrió tras ellos porque preguntas vinieron a su mente. 

Corrió entre las enfermeras, y entre los doctores que avanzaban por los pasillos, hasta que llegó a la sala de espera donde Phoe estaba sentada en un asiento llorando, y los policías hablaban con ella. Luke estaba un par de pasos más lejos, Maia se quedo petrificada y con los pies pegados al piso. 

¿Que tenía que ver Phoe con Jack? ¿Y porque los policías hablaban con ella? ¿Ella había demandado a Jack?

Dio un par de pasos vacilantes hasta que quedó frente a ellos. Phoe fijó sus ojos en ella, y pareció sorprendida. 

― Lo siento ― murmuró. 

― ¿Que hiciste? ― fue lo único que Maia pudo decir. 

El oficial del bigote había tomado el brazo de Maia para alejarla, pero Phoe hizo que el oficial apartara la mano.

― Yo no quería, de verdad que no. Yo solo fui estúpida, y todas mis mentiras me están cayendo en la cara.

― Podrías ser clara. 

― Yo no quería. 

― Phoe, no me interesa si querías o no. ¿Que hiciste? ¿Culpaste a Jack de algo que no hizo? 

― Yo no sabía que él estaba acá, que él estaba así...

― Puedo verlo ― dijo Maia con una sensación de enojo burbujeando en su interior. 

― Es que yo, estoy asustada. 

― ¿Y por que estas asustada inculpaste a Jack? 

― Si, mira Maia. Todo lo que he hecho está mal. Hay muchas cosas que no sabes, y que debo decirte. 

― ¿Debería sentarme? ― dijo con ironía. La única amiga que tenía al parecer tenía más secretos sucios de los que parecía. ¿Por que todo en su vida era tan complicado? 

― No, pero... Yo acusé a Jack, yo le pedí a Jack que te hiciera creer que habías dormido con él, yo traté de separarte de Ashton, yo quería quitarte a Ashton. He tenido que ver en tu vida más de lo que parece. 

A estas alturas, Luke estaba cerca de Phoe, y al parecer su cara se había descompuesto más aún que la de la misma Maia. 

― ¿Phoe?― preguntó el rubio por lo bajo. 

― Y lo siento también Luke, pero a ti solo te use como cuartada. Puedes irte, no tienes nada que hacer aquí, ya todo ha sido descubierto ¿no?

― Yo te amaba ― susurró por lo bajo, con la inocencia de sus ojos azul haciéndose más evidente que nunca. 

― Yo no puedo controlar eso ― masculló Phoe con indiferencia sin despegar los ojos de los de Maia ― Maia, lo siento. Tienes que perdonarme. 

― ¿Perdonarte? ¿En serio? 

― Si, yo he hecho las cosas mal, he mentido, y me arrepiento. Pero necesito que me perdones. Ya no me interesa Ashton. 

― Estas loca, no puedes jugar con la vida de los demás y luego solo decir lo siento. Como si fuera una obligación del resto hacerlo. ¿Mike lo sabe?

― No, él no sabía nada. 

― Me alivia saber que al menos alguien aquí es real. 

― ¿No dirás nada más?

― Tengo cosas más importantes que hacer. 

Maia comenzó a alejarse en dirección a la habitación de Jack, pero la voz de Phoe hizo que se detuviera. 

― Dile a Ashton que lo siento. 

No se molestó en contestarle. Caminó por el pasillo rápido, con su mente dando vueltas y vueltas en las palabras de Phoe. ¿Cómo podía alguien ser tan manipuladora? ¿Cómo podía ser alguien tan mala persona? 

Pero se detuvo de golpe al ver inusual torbellino de gente fuera de la habitación de Jack. ¿Qué demonios estaba pasando?

Una enfermera joven la tomó por el brazo, y tiró de ella lejos. 

― ¿Que está pasando?

― Será mejor que espere en la sala. 

― ¿Esta él bien?

― No es algo que podamos contestar. 

Y sin decir nada más, cerró las puertas de vidrio en su cara, dejándola en una sala de estar ahora vacía, con las manos temblando y esperando lo peor.

A tu lado // Ashton Irwin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora