En medio de un día gris y frío, Jill se encontraba en el auto de León, dispuesta a irse a su trabajo en la B.S.S.A, pero para su infortunio, un conocido apareció repentinamente, he hizo que volvería a sentir ese vacío en su corazón que alguna vez sintió.
-Chris...-Musito entre dientes y con una mirada cada vez más temblorosa.
Con una voz gruesa y varonil, el Respondio:
-Pense que no te encontraría Jill.-¿Como encontrates mi dirección?-Increpo ella muy tensionada.
-Hable con Claire, ella me lo dió, además, mi hermana me dijo que había algo importante que me dirías.
La agente dió un sobrevalto, y con una expresión tenue en su rostro, dijo lo siguiente-No tengo nada decirte, Claire se confundió quizás.
Chris dió un paso hacia atrás de tan solo escuchar esas declaraciones, acto seguido de manera brusca, tomo los bordes de la ventana y forma tajante dijo:
-Bueno, pero yo si tengo algo que decirte Jill-¿Hacia donde vas, a la B.S.S.A--pregunto.
-Voy a mi trabajo...-Respondio Jill secamente, intentando parecer indiferente.
El Capitán pareció haber captado la indiferencia de su excompañera, y para poder acercarse más a ella, dijo-Entiendo, ¿puedes llevarme a la base tengo que ver a los jefes?
Jill pensó la petición durante los escasos segundos que tuvo, al final y de manera repentina, concluyó que después de todo Chris le diría lo que ella ya sabía, por ello acepto.
-Bien, sube...Chris rodeo el Porsche para poder entrar en el asiento del copiloto, al estar dentro, cerro la puerta y se colocó el cinturón de seguridad, todo si mirarla aún.
-No sabía que te gustaba la marca Porsche Jill, es un bonito auto debo admitir-Afirmo el hombre, mientras examinaba el tablero del auto.-En realidad no es mío-Indicon Jill aún con la mirada hacia delante.
-Oh enserio, entonces, ¿de quién es?-Cuestion con cierta curiosidad.
Jill se quedó petrificada, no tenía idea hasta dónde había llegado, pero al final era exactamente lo que queria, restregarle en la cara su felicidad con otro que no sea él, por lo cual, espero unos segundos, y de manera tajante respondio un poco arrogante-Es de mi novio, el suelo prestarmelo.
Acontinuación nn silencio incómodo se apoderó del auto, y es que la afirmación que la mujer había hecho, sorprendió al capitán que consideraba totalmente inaudito, Jill no lo pensó, lo hizo de manera espontánea y con tiras de venganza, Chris seguía sin poder creer la declaración que había escuchado.
La mujer seguía sin mirar a Chris, ella seguía manteniendo su mirada en el parabrisas, Por otro lado el capitán la observaba fijamente.
-¿Tu...tu novio?-Con algo de trabajo, Chris termino la pregunta.
Jill quedó congelada, y no por el frío que hacía afuera, si no porque, no sabía que decir, no sabía cómo reaccionar y que hacer, La castaña quería devolverle con la misma moneda a su excompañero, quería verlo sentir lo mismo que ella sintió en su momento.
-Como dije, el auto es de mi novio, el mío sigue en el taller, y como todo lo que tengo es de el, no tenemos problemas en compartir-Respondio después de esperar unos segundos antes de argumentar.
Chris se quedó sin palabras, no podía creer lo que escuchaba, y más de una manera tan directa y dura, por parte de una mujer gentil como Jill, ¿Qué acaso cambio tanto en poco tiempo?
-Entiendo, Entonces creo que lo mejor que nos pasó a ambos, fue haber seguido nuestro camino por su cuenta...
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La historia de Leon y Jill
RomanceEs el libro 1, DE LA SAGA LEON Y JILL El agente de la D.S.O Leon S. kennedy sufre un terrible accidente que lo deja invalido por un tiempo, ocasionado por tratar de salvar a Jill, la cual se encontraba en peligro, Ante esta situación, la mujer para...