¡No se admiten mascotas! <JackBeom>✓

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—Mucho gusto, estoy saliendo con Bambam. Mi nombre es Kim Mingyu, un placer conocerlos.

Esas palabras bastaron para sembrar un incómodo silencio que se extendió por varios segundos. Si bien, tanto Jaebum como Changkyun aceptaron su apretón de manos, era claramente palpable en su rostro la estupefacción. Obviamente, Mingyu no era ajeno a esto, la ligera sonrisa divertida en sus labios bastaba para notarlo.

—Ustedes son… —fue él mismo quien rompió el silencio, ampliando levemente su sonrisa ante el silencio reinante.

—Im Jaebum, un placer —Jaebum se levantó, reaccionando finalmente —. Él es Changkyun, mi hermano menor.

—Oh, ya veo —Mingyu recorrió a Changkyun con la mirada, sin disimular en lo más mínimo la ligera gracia que le daba ver al humano todo mojado en aquella faceta tan deprimente—. Es agradable conocerles finalmente. Bambam habla mucho sobre sus amigos —su mirada se enfocó entonces en el mayor de los omegas, ligeramente protector—. Jackson… ¿todo bien?

Jackson tragó en seco al sentir la mirada de todos los presentes posándose ahora en él. Las cosas estaban tomando un rumbo ligeramente desordenado. Cada cosa que Mingyu decía parecía sembrar un poco más de incomodidad. Buscó a Bambam con la vista, casi suplicándole en silencio que hiciera algo. El menor lo notó y se aclaró la garganta aparatosamente, reaccionando después de su propio shock.

—Bien… los dejaremos para que se conozcan y se pongan al día. Ayudaré a Jackson a arreglarse, ya estamos atrasados. —dijo, rodeando la mesa para tomar al mayor del brazo y levantarlo de allí, llevándoselo rumbo a su habitación.
Jaebum los siguió con la vista, visiblemente curioso.

—¿Tú y Jackson se conocen? —preguntó, dirigiéndose a Mingyu, quien aún tenía aquella sonrisa levemente irritante en su rostro.

—Por supuesto —contestó con tono satisfecho—, es amigo de Bambam después de todo. ¿Qué clase de novio sería si no conociera bien a mi pareja?

Changkyun dejó salir un bufido, acompañado de una mueca de desagrado ante ese comentario. Mingyu lo miró de reojo, sin borrar su sonrisa.

—Hay algo que me causa curiosidad —ladeó su cabeza, apoyándose en el respaldo de la silla vacía que quedaba justo frente a él—… Perdonen si soy entrometido pero, ¿estaría equivocado si asumo que ustedes son los hijos de la presidenta de Im Pharmaceuticals?

De nuevo ese silencio que tanto parecía complacer al híbrido. Los puños de Changkyun temblaron ligeramente sobre la mesa, su expresión ensombreciéndose ante la sola mención de la compañía de su madre.

Jaebum por su parte, dejó salir un suspiro.

—No, no estarías equivocado. Así que podemos dejar de jugar a que no sabemos nada uno del otro. ¿Exactamente qué quieres aquí?

Mingyu finalmente se rió, relajándose visiblemente a la vez que movía la silla para tomar asiento.

—No quiero nada… ya les dije. Estoy saliendo con Kumpimook.

—Perdóname… pero me cuesta trabajo creer que Bambam esté saliendo con un criminal.

—Vaya, estás mejor informado de lo que pensé —Mingyu se recostó contra el respaldo de la silla, cruzando una pierna sobre la otra—. Pues bueno, razón no te falta. A Kumpimook también le cuesta un poco de trabajo creerlo.

Jaebum apretó sus labios, buscando paciencia.

—¿Acaso estas extor…?

—Dijiste que nos dejáramos de juegos, ¿no? Entonces supongo que eres capaz de entender lo que pasa entre un alfa y un omega cuando están destinados. No hay extorsión de ningún tipo. Aunque tampoco tendría nada de raro que Bambam saliera conmigo… nadie nunca se ha quejado de mis dotes de alfa, algo que tú, por desgracia, no puedes decir de ti mismo.