¡No se admiten mascotas! <JackBeom>✓

25🐾

J.B. casi pega un brinco en el sofá al sentir que la puerta de la casa se abría. Esperaba que fuera Jinyoung, honestamente, se había preocupado mucho por esa llamada. Aunque le había prometido que no le haría preguntas al respecto, sí quería estar ahí para él por si necesitaba algo. Sabía que la familia de Jinyoung podía ser un poco complicada porque la suya también lo era.

Pero no fue Jinyoung quien abrió la puerta.

Fue Mark.

J.B. solo hizo una mueca de desagrado y se volvió a dejar caer sobre el sofá para continuar viendo la televisión. Mark notó la indisposición que el humano sentía con su presencia, pero decidió ignorarlo, no tenía el más mínimo deseo de volver a tener alguna confrontación de algún tipo con él.

-Buenas noches.- lo saludó y se dispuso a dirigirse a su cuarto.

-¿No vas a comer?- J.B. le preguntó sin mirarlo y sin contestarle el saludo.

-No, comí donde Youngjae porque me pidieron un par de horas extras para ayudar con el inventario.

-Ya veo...- Jaebum seguía con la vista fija en la televisión. Mark lo miró por unos segundos. Sabía perfectamente que esa mañana había sucedido algo entre él y Jackson. Aunque Youngjae hubiera intentado sacarlo de casa por la fuerza, él lo había notado. Había sentido el olor de Jackson y el de Jaebum alterados, envueltos en una sola fragancia penetrante.- ¿Dónde están los demás?

-Si te refieres a Jackson, está en su cuarto. Lleva todo el día allí. No ha comido nada, así que deberías encargarte de eso.

-¿Por qué no ha querido comer?

-Simplemente no ha salido del cuarto. Yo no tengo por qué saber lo que le pasa...- miró a Mark a los ojos por primera vez en la noche.-... yo no soy tan cercano a él... no como tú.

Mark notó que ese comentario quería decir muchas cosas, cosas que él seguía sin entender muy bien. ¿Estaría celoso Jaebum? ¿Por qué? No era posible que se hubiera dado cuenta de que Jackson era su omega, no, un descubrimientoasí no hubiera pasado desapercibido. Tal vez simplemente estaba reaccionando como el alfa que al fin y al cabo era... ¿Pero porque tenía que cogerla con él? Jaebum no le caía precisamente mal, pero con esa actitud no conseguía otra cosa que ponerse en su lado incómodo. Su lado animal, su lado alfa, inevitablemente reaccionaba ante la mirada desafiante de Jaebum. Mark era un león, un macho alfa que no estaba acostumbrado a ser desafiado, la presencia de otros alfas menores que desafiaran su autoridad solo conseguía ponerlo de mal humor. Como humano no quería reaccionar, pero J.B. le estaba buscando los tres pies al gato, y si seguía así, se los iba a encontrar.

-Iré a ver qué le pasa.- dijo finalmente, optando por ser civilizado y dejar el asunto ahí.

Desde que subió las escaleras pudo sentir el olor de Jackson. Eso no era normal, no era común que el olor del omega fuera tan fuerte, si no le pasaba nada, no debería de oler así. Apuró un poco el paso y abrió bruscamente la puerta de su habitación.

Jackson estaba en su cama, envuelto con las sábanas, su olor bastante descontrolado, como si no pudiera hacer nada al respecto, como si...

-Jackson...- se acercó a él y lo zarandeó.- ¿Qué te pasa?- un incómodo deja vu se paseó por su cerebro. Él no tenía salud como para que esto le pasara todas las semanas.- Jackson ¿Qué te pasa? Y no me vayas a decir que nada.

-Hyung, creo que...- Jackson sonaba agitado...- No sé por qué pero...

Mark descubrió las sábanas. Jackson estaba sudado y apretando su abdomen.

-Estás en celo.- Mark ató los cabos sueltos rápidamente.- Pero... tu celo fue hace menos de dos meses. ¿Por qué estás en celo de nuevo?

-No sé. Pensé que sería otra cosa pero desde ayer por la noche me empecé a sentir mal.