¡No se admiten mascotas! <JackBeom>✓

26🐾

Bambam sintió que tocaban en su puerta en medio de la noche. Restregó sus ojos, aun medio dormido, pero bastante seguro de haber escuchado bien.

De nuevo los toques, acompañados de la queda voz de Mark.

-Bam…- lo llamó.- Despierta.
Bambam se levantó y fue hasta la puerta, puso su mano sobre el manubrio pero se congeló en el acto. ¿Realmente estaba bien que dejara entrar a un alfa a su habitación en medio de la noche?

-No te preocupes. Es por Jackson.- agregó el alfa, como si pudiera leer su mente. Bambam abrió la puerta y observó a un Mark preocupado en el pasillo.

-¿Qué sucede? ¿Qué pasa con Jackson?

-Está en celo.

-¿Cómo?

-Se le ha adelantado el celo. Yo qué sé… necesito… necesito supresores. Si aún tienes. Es para él, te prometo que los pagaré.

-Ah, sí claro… - Bambam entró de nuevo a la habitación y salió a los pocos segundo con una bata de baño encima y el frasco de supresores en sus manos.

-Menos mal que Yugyeom me devolvió el frasco cuando terminó su celo, de lo contrario tendríamos que ir a preguntarle y créeme, no queremos entrar ahí.- le dio el frasco a Mark y salió del cuarto rumbo al cuarto de Jackson.

-Hyung…- llegó junto a él. Jackson estaba aún peor que Yugyeom, y eso que Yugyeom había debutado. Estaba temblando y sudoroso, su piel, sin embargo, no se sentía tan caliente, pero parecía dolerle, mucho.- ¿Por qué está así?- se giró a preguntarle a Mark, quien miraba la etiqueta del frasco sin entender mucho.- Dame.- le quitó el frasco y sacó dos píldoras.

-No sé. Creo que Jaebum tiene algo que ver con esto. Más que un celo… parece otra cosa. Sus celos no son así. Usualmente no pierde el conocimiento, ni suda tanto. Le basta con que yo esté a su lado, mi olor lo calma. Pero ahora… es como si estuviera teniendo alguna reacción de algún tipo.

-Debe ser porque no se puede enlazar con Jaebum hyung.- Bambam le puso las pastillas en la boca a Jackson y le dio agua de una botella que había sobre la mesita. Jackson no estaba tan inconsciente así que pudo tragar sin ahogarse, sin embargo, seguía sin responder.- Y, para colmo, lo tiene debajo de la nariz todos los días. Eso no hay quien lo aguante. Por supuesto que su cuerpo tiene que reaccionar.- Bambam arrugó la nariz.- Su olor es así de fuerte…- se giró a ver a Mark.- ¿Estás bien?

-También te llamé por eso. No creo poder soportarlo mucho tiempo. Es como si… Jackson normalmente huele bien, pero ahora… huele a sexo puro. Es como si fuera un cebo para alfas. ¡Qué alfas! Para cualquiera.

-A mí no me huele tan así…

-Pues eso es genial. Porque a mí me está volviendo loco.- Mark se había quedado junto a la puerta, sus brazos fuertemente cruzados contra su pecho.

-Ya, ya le di los supresores. Sé que no se debe subir la dosis pero creo que tendremos que darle lo máximo que se puede dar.- miró la hora en su celular.- Ahora son las cuatro de la mañana. Dentro de seis horas habrá que darle de nuevo.

-¿Puedes encargarte de eso tú? Mañana, bueno, hoy, es mi día libre, pero yo no puedo estar aquí. No con Jackson así. Iré a trabajar al frente. Me puedes llamar si sucede cualquier cosa, pero, por favor, por el momento, cuídalo tú.

-Está bien, hyung.

-Te prometo que te pagaré los supresores.

Bambam chasqueó la lengua.

-Créeme, preocúpate por cualquier cosa menos por eso.

-No, ya me pagaron mi primera semana, si lo guardo y luego…