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Eran aproximadamente las once de la noche, Youn miraba la sección de Para Ti de TikTok, buscaba algo para distraerse mientras se quedaba dormido, la práctica de toda la semana lo tenía exhausto, aprovecharía el tiempo de descanso que les dieron para la próxima competencia.

Apagó su celular después de ver los Tiktoks de la niña que hace slime en su tablet, lo puso a cargar y se envolvió en la sabana, apenas cerró los ojos, el timbre de su departamento sonó.

—Chingado.— se levantó un poco molesto imaginandose quién podría estar en la puerta.

Al abrirla se encontró a Wooseok en pijama sosteniendo una almohada y una mochila —Mmm, no puedo dormir estando solito.— murmuró escondiendo el rostro en la almohada.

Se quejaría pero, ya había irrumpido muchas veces en su departamento en la noche mientras lloraba por su amor unilateral, rió un poco y lo dejó pasar cerrando la puerta detrás —Si se supone que Hangyul regresa el lunes, y traes una mochila, ¿me estás diciendo que te quedarás hasta el domingo?— abrió la boca sorprendido.

Kim soltó una risa nerviosa —¿Nunca habías querido un roomate?— se sentó en el sofá.

—La verdad no, pero eres tú así que no importa.— le sonrió —Aunque si hubieras venido meses atrás te hubiera cerrado la puerta en la cara, por castroso.— lo molestó mientras se sentaba a su lado.

—Perdón, pero eres molestable.— se encogió de hombros.

—Ahora que lo pienso, solo hay una cama, y el sillón es pequeño, significa que... ¿Vamos a dormir juntos?— tapó su boca sorprendido.

—No me digas que ya te dió gay panic, bien que duermes con Seungwoo.— rodeó los ojos —No te preocupes por mí, ni que tuviera una manía de desnudarme mientras duermo.— se quejó soltando el aire que estaba en sus pulmones, escondió despistadamente la mitad de su rostro en la amohada, este amenazaba con adquirir color, había olvidado ese pequeño gran detalle.

—Tu novio me pega, no~, imaginate que le diga a todo el club de Taekwondo que me golpeé.— se abrazó a si mismo con temor.

—Dios, Hangyul sabe que eres mi amigo, no me estoy acostando contigo, bueno de manera literal, pero no de la manera sexual, ay, tú me entiendes.— habló nervioso terminando por patalear de la desesperación.

Se echó a reir a carcajadas por la frustración de Woo —Sabes, te ves adorable en pijama abrazado esa almohada, parece que estás chiquito y no puelles.— chilló de la ternura y apretó su mejilla.

Wooseok parecía estar a punto de alcanzar los treinta y nueve grados en su rostro por lo que comenzó a golpearlo repetidas veces con la almohada.

—¡Ya, ya!— se levantó y corrió hacia su habitación escondiéndose bajo la cobija.

—¡No estoy chiquito!— se queja subiendo a la cama para seguir golpeandolo con la almohada.

—¡Está bien, bien!— esperó a que se detuviera y después salió de las cobijas —Agresivo.— murmura y lo mira mal.

Mostró una sonrisa y dejó sus cosas a un lado —Buenas noches.— apagó la luz mientras reía y se recostó en la cama.

—No te corro porque te tengo piedad.— murmuró y se recostó del otro lado de la cama dándole la espalda.

Era de madrugada, había caído rendido en los brazos de Morfeo después de pelear con Wooseok, su vejiga pedía ser vaciada por lo que levantó con los ojos medio cerrados y se dirigió al baño mientras los tallaba para poder ver, tampoco quería partirse la madre.

❛ Mi Vecino de Número ❜「 Seungpyo 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora