50. Los herederos del Éter

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Dedicado a Ephimeralhuman y Baladaoscura

Elizabeth

Urian se inclinó hacia mí, su rostro de mármol no mostraba una mínima expresión: ni furia, ni enojo, ni diversión. Acabar con mi vida solo sería un mínimo inconveniente para él.

Quizás eran mis poderes videntes pero en el fondo supe que en cuanto me tocara, moriría y por algún motivo me encontraba incapaz de moverme a medida que lo veía acercarse hacia mí.

Estaba a un centímetro de mi frente cuando su dedo se detuvo. Urian frunció el ceño y observó su mano, visiblemente confundido.

-¡Te dije que no la tocaras!- grita Zara a sus espaldas y le pega un puñetazo tal que lo manda al suelo.

Por un instante la perplejidad se adueña del rostro de Urian y lo hace lucir más humano que nunca. El fue humano alguna vez. Pienso, incrédula. Él parecía un demonio más que lucía como nosotros pero definitivamente no un humano.

Zara toma mi mano y me aparta de él, colocándome detrás suyo.

-Si quieres matarla tendrás que matarme a mí primero- lo amenaza. Urian se incorpora y recompone su expresión, sin embargo una pequeña mueca en la comisura de su labio lo delataba. Estaba enojado.

-La Bruja Blanca- dice y suena como veneno en sus labios- Hécate estaría decepcionada de sus descendientes.

-A Hécate nunca le importaron las personas mágicas- contesta Zara- no comenzará a importarle ahora.

-Eso es algo que tenemos en común, mi padre tampoco nunca se mostró muy afectivo conmigo- comenta Urian, una sonrisa tan hermosa como letal dibujándose en su rostro- intentó mantenerme dormido eternamente y cuando eso no funcionó envió a mi hermano y sus amigos a matarme, ¿No es hermosa la familia?

-La familia es más que la sangre- contesta Zara.

-Cierto- comenta él observando sus uñas. Cuando nos mira, sus ojos son tan fríos que podrían habernos atravesado- pero nunca se me dio la oportunidad de elegirla. Se me consideró peligroso en cuanto fui creado, se me trató como una peste, un parásito que debe ser eliminado. Mi hermano no dudó un instante en matarme, ¿Cómo sabía que no lo hubiera elegido a él?

-No intentes vendernos una falsa bondad- le digo rodeando a Zara para pararme delante de ella- No te importaba el Eiden, no te importa Sebastian y mucho menos te importa Sher. Solo quieres vengarte, desquitarte con Zeus y el Olimpo y en tu odio nos arrastras a todos.

-Ser asesinado y encerrado en la nada misma sin saber si algún día volveré a ser libre podría pudrir hasta al alma más pura, eso te lo aseguro- dice Urian.

-¿Ahora eres un alma pura?- me burlo.

-Sé que todo esto- dice señalándolos- es un truco barato para distraerme de lo que está pasando allí afuera.

Zara y yo enmudecemos, definitivamente no esperábamos que dijera eso.

-Lo supe desde el momento que pisaron mi base, Sebastian los estaba esperando, ¿Saben? Es bueno guardando sus pensamientos de mí pero a veces su mente lo traiciona. Estaba por terminar de romperlo, sin embargo su hermano, su joven y fuerte hermano se ofreció para venir a rescatarlo.

Cerré mis manos en dos puños conteniendo el impulso de atacarlo. Sabía que no sería sabio provocarlo, no ahora que Zara estaba aquí y había perdido mi conexión con el mundo real.

-Sabía de su tierna trampa y he caminado directo hacia ella para darles algo de esperanzas, ¿No haría eso alguien de alma pura? Yo creo que sí- nos dice con una sonrisa encantadora que no creemos por un segundo- Ahora mi nuevo envase ha venido hacia mí. Voy a romperlo, voy a destrozarlo hasta que su mismísima alma desee simplemente desvanecerse y cuando lo haga, voy a caminar por esta tierra de nuevo.

La sonrisa de Urian muere con sus palabras cuando vuelve a hablar, un sentimiento de pánico creciendo en mi interior.

-Verán que tan bondadoso puedo ser.

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APROBÉ MI EXAMEN CON UN 9 JAJAJAJAJAJA Me sirvieron sus buenas vibras <3

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