Capítulo 15

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El tiempo de vuelta fue más cansado que la ida por algunas pendientes en donde Becka tuvo que hacer más fuerza con sus piernas, y para una persona como ella que desde su juventud jamás había vuelto a hacer algún deporte o esfuerzo físico casi le había costado un pulmón como pago.

Dejaron las bicicletas en el mismo lugar del garaje. Yibo junto a un video tutorial de cómo hacer un platillo típico chino pudo lograr hacer algo totalmente comestible y para decir la verdad el sabor había sido demasiado bueno. Después de una rápida comida Becka se encargó de llenar la bañera para poder quitarse cualquier rastro de sudor y suciedad por la excursión.

Con una bata rodeando su menudo cuerpo avanzo hasta el cuarto de baño, echo un vistazo por el ventanal que tenía junto enfrente de la bañera, podía ver los arboles rodear la casa y seguían hasta donde su vista podía llegar. Si ella hubiese venido a ciegas a este lugar jamás pensaría que en medio de un frondoso bosque se hallaba una casa de tal magnitud. Y mucho menos que pertenecía a una de las personas más famosas del momento en china.

— ¿Todo bien? —Becka dejo caer el albornoz de algodón y entro en la bañera despacio con los ojos sobre Yibo quien estaba con la cabeza apoda sobre el borde y los ojos cerrados.

—Si —respondió simple, sin moverse y sin abrir los ojos

— Te noto algo disperso —con un ligero movimiento ella se colocó entre las piernas de él mirándolo fijamente, al notar como Becka tocaba su abdomen abrió los ojos y la miro totalmente embelesado, poseído por la figura tan erótica que yacía entre sus piernas y lucho con todo lo que pudo para que una erección no asomase y peor aún que ella la notara.

Becka sabía que algo andaba mal con él, desde que habían llegado a la casa de nuevo había visto como aun que pareciese que el cuerpo de Yibo estuviese presente su mente se había marchado desde hace un buen rato.

—El paseo me canso un poco —aun cuando el acaricio la cabeza de Becka ella intuía que con ese gesto el solo intentaba tranquilizarla pero al contrario esto cada vez la ponía más inquieta y temerosa.

—Entonces bañémonos te daré un masaje

— ¿Sabes dar masajes? —pregunto

—Por supuesto, vas a estar como nuevo después de eso, venga —ella extendió sus manos para tomar las de él y ayudándose se pusieron de pie.

Con ligeros jugueteos y carcajadas se limpiaron el uno al otro y salieron de aquella bañera cuadrada. Aun con la toalla sobre su cintura Yibo se recostó bocabajo sobre la cama expectante a su acompañante.

— ¿Has hecho esto antes?

—Sí, mi papá suele sufrir mucho de estrés por el trabajo así que lo ayudo con eso cada vez que puedo.

—Bien, con esas referencias entonces creo que puedo dejar que lo hagas sin temer a que me rompas algo —Becka rio por el comentario.

Con un bote de crema que en realidad usaba para hidratar su piel se subió a la cama y se sentó sobre la espalda baja de Yibo.

—Sería el éxito hacer esto con aceite pero no suelo llevarlo a mis viajes

—No importa para mí la crema también está bien.

Regó un poco de crema sobre la espalda desnuda de Yibo y la esparció despacio con sus dedos ejerciendo un poco de presión sobre las zonas donde Becka sentía que se encontraba la tensión.

— ¿Duele o está bien? —preguntó ella

—Está bien, se siente bien —su voz salió amortiguada por lo que su rostro estaba hundido en la almohada.

Mistakes《Wang YiBo》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora