45. Adiós

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- Vamo a calmarno... jodé... estáis como una puta cabra las dos... Vamos a reunirno y aclará varia cosas -.

La llevé hacia la sala de los espejos que dejó a todas impresionadas, me fijé en Zulema y parecía sincera en su sorpresa, pero no sé qué pensar...

- Bua... esto es un Instagram prehistórico – dijo Triana rompiendo un poco la tensión.

- Es el purgatorio – dije mirando a la rubia, había estado a punto de dispararle a la única persona que me importa en la vida. Pero me ha engañado y vendido a la policía.

- Bueno vamos a repartir los diamantes, yo me voy de aquí – dije con toda la frialdad que pude, sin mirar a Zulema por miedo a derrumbarme.

Tiré la bolsita de diamantes a Goya – Esta tarde nos recoge el helicóptero – me empezó a vibrar el móvil y me salí a la puerta.

- ¿Flaca? -.

- No, soy su marido. Han matado a Flaca y los narcos van a por vosotras, si no es que no están ya allí – Tenía que pensar rápido como sacarlas de allí.

- ¿Con quién hablabas? – pregunté Zulema con bastante furia.

- Con nadie -.

- Pero a ti ¿Qué te pasa?, me juras amor de noche y me vendes de día. ¿A ti te da todo igual verdad? Me has destrozado la vida... Otra vez – lo último se lo dije prácticamente escupiéndoselo.

Vi a Mónica espiando - ¿Qué coño haces ahí? ¡Pírate! – avanzó por el pasillo y salió de la estancia. Miré a Macarena – No soy tan zorra como tú, me he tragado el cuento de que me quieres ¿sabes?... follándote al policía, vendiéndome y haciéndome sentir culpable porque Mónica me coquetea... muy bien... el óscar a la mejor actriz es para ti, hija de puta -.

- Gracias a ti – avancé por el pasillo y salí de allí – Adiós mi vida... -.

- Muy bien, irse todas... mejor – cargué mi pistola, me encontré a Cepo y lo mandé a averiguar todo lo posible de los narcos. Me dirigí a la zona de la piscina, necesitaba pensar y sacarme a la puta rubia de la mente.

Me subí al coche y Mónica tocó la ventanilla - ¿Puedo irme contigo? Siento lo de Zulema de verdad... no sabía que tenía algo contigo – Ahora que sé que Ama está muerta y los policías no han podido hacer su puto trabajo, lo mejor es desaparecer antes que al escorpión le dé por atar cabos.

- Debería reventarte a hostias... pero ya qué más da... Sube – respondí secamente, antes de arrepentirme.

Estaba fumando y apareció Vivi – Necesito una pistola – me dejó un poco cortada con su petición.

- Pos cómprate una – decidí ignorarla.

- Voy a matar a mi padre -.

- Pírate, no es un buen momento – la empujé para que se fuera.

Se volvió hacia mí nuevamente – Me hace fotos, me mira mientras me ducho... - su cara me rompió aún más mi lastimada alma ya que me recordó a Fátima.

- Toma – le di la pistola y la enseñé a usarla – Asegúrate de que tu madre lo vea -. La niña desapareció y decidí irme a mi habitación.

Íbamos saliendo por el camino de tierra cuando nos interceptaron los hombres de Ramala – Tenemos dos opciones, quedarnos aquí y esperar a que nos acribillen o salir y hablar con ellos -.

- Yo no voy a salir... si algún día te reencuentras con Zulema dile que se equivocó de rubia y... Maca... yo también conocía el hotel, piénsalo – sabía que iba a morir, al menos que solucionaran sus problemas.

La miré con cara de pocos amigos y salí del coche. Los hombres de Ramala rociaron de gasolina el coche, Mónica se metió un chute y murió quemada viva.

- ¿Tú qué clase de monstruo eres? -.

- El peor... y ahora... sé que tienen a mi hija, así que vas a venir con nosotros -.

Estaba tumbada en la cama dónde tan solo unas horas antes había sido inmensamente feliz con Macarena... - Quizá sea lo mejor – acaricié las sábanas – Puedo perdonar que intente matarme... pero entregarme a la policía cuando fui yo la que la sacó de la cárcel... -.

Pegaron en la puerta – Sulema están bien armados y con camionetas. Mataron... -.

- ¿A quién mataron? – pregunté temiéndome lo peor, ya que Macarena se había ido.

- Mataron al pibe joven.... Y tienen a la rubia bonita y quemaron a la otra dentro del coche -.

- JODERRR... - y ahí estaba yo, en la tesitura de si salvar a Macarena o dejarla morir. Fui a buscar a Triana y Goya para contarles lo que estaba pasando.


Aquí os dejo otro capítulo! Espero que lo disfruten!

Siguiente cap: 46. No sé si darte las gracias o un puñetazo

ZURENA - NUESTRO OASIS - [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora