ZURENA - NUESTRO OASIS - [COMPLETA]

13. Voy a cuidarte siempre

Gracias a tod@s por los comentarios! Me alegro mucho de que les esté gustando ♥️♥️

- Bueno ya os hemos contado toda nuestra vida, el noviazgo, la boda, el nacimiento de David... y de vosotras no sabemos nada ¿Cómo os conocisteis? – preguntó Alicia con curiosidad.

Maca y yo nos pusimos un poco pálidas pero intenté salir del paso – Yo trabajaba en el Burguer King de al lado de su facultad, ella venía muy a menudo después de clase o después de alguna fiesta y yo desde el primer día que la vi entrar por la puerta no pude dejar de mirarla. Eso sí, aunque era una pija repelente de lo peor, a mí siempre me trató con respeto – dije rememorando su entrada a la cárcel.

- Sí, lo que no sabía ella es que siempre esperaba para cruzarme con ella o que me atendiera, o me levantaba por kétchup... en fin que me las ingeniaba para cruzarme con ella – respondí recordando como es que siempre acababa metida en sus problemas.

- Yo también hacía lo posible por atenderte y por cruzarme contigo, me tenías al borde del infarto – le apreté la cadera con suavidad y la miré con cariño.

- Hasta ahí todo normal, una chica de doctorado en empresariales en un sitio de comida rápida. Se podría decir que nos conocimos hace tres años, pero fue hace uno y medio cuando todo cambió entre nosotras. Una noche después de salir de fiesta llegamos al Burguer en muy mal estado y acompañadas de unos tipos que no llevaban buenas intenciones, salimos de allí y justo al lado hay un descampado en el que intentaron abusar de mí y al no conseguirlo me metieron en un bidón lleno de agua con lejía y detergente, lo cerraron y lo lanzaron, parecía como si estuviera dentro de una lavadora... casi me matan... – conté haciendo alusión a lo que las chinas me hicieron en la lavadora.

- Yo los había seguido y estuve a punto de intervenir cuando intentaron forzarla, lo que no me esperaba es que le hicieran eso y la dejaran dentro del bidón. Hice ruido para que se asustaran y se marcharan y así fue, la saqué como pude de aquel bidón, tenía muy poco pulso y le dice el boca a boca, pero no respondía. Llamé una ambulancia y se la llevaron -.

- Ósea, que vuestro primer beso fue para salvarle la vida a ella... Dios mío y ¿Qué pasó? -.

- Estuve siete meses en coma -. Respondí con tristeza.

Volví a apretar su cadera y a besar el lateral de su frente, lo que ella aprovechó para acurrucarse un poco en mi pecho.

- Cuando desperté la busqué para darle las gracias -.

- A partir de ahí se podría decir que nos hicimos amigas, después salimos juntas de Madrid con la idea de un negocio, pero la cagué diciéndole que me gustaba y aquí estamos – dije riéndome pero a la rubia no le había hecho gracia el comentario.

- Y yo la cagué haciéndole caso y aquí estamos – dije bastante seca, me había molestado su comentario. Para mí esto es algo serio, que me está provocando muchos dolores de cabeza al sentirme culpable por sentir cosas por ella. Me parece increíble que se lo tome todo a broma.

- Ya en serio, en realidad no le dije nada solo la besé, ella me correspondió y me alegro de que lo hiciera – la besé despacio en los labios y le di un beso en la frente. Esta vez fue ella la que me besó, pude ver como se le aguaban los ojos y se acurrucaba contra mí.

- Dios que historia tan trágica y a la vez tan bonita. No me extraña que os miréis así después de lo que habéis pasado, se palpa el amor que os tenéis – dijo Alicia un poco afectada.

- Bueno ya basta de tristeza ¿Quién quiere una copa? – dijo David.

Macarena y Alicia se tomaban los chupitos de tequila como si fuera agua, le verdad es que ya me estaba dando miedo. Parece que en la universidad hacías más cosas aparte de estudiar, estaba asombrada por la cantidad de alcohol que había ingerido la rubia y su nueva amiga. Mientras David y yo apenas nos habíamos tomado una copa, aunque él se notaba bastante molesto con la situación y no es para menos, pues las dos estaban cantando a grito pelado "Sobreviviré" de Mónica Naranjo, pero con la mitad de voz y el triple de desafinación. David no aguantó más y quitó la música.

- Alicia ya está bien, son las 3 de la mañana y ellas querrán irse a descansar -.

- Uno mash... solo uno – respondió una Alicia bastante tocada.

- No, ni uno más -.

- No ya no más, nosotras nos vamos – respondí avergonzada por el espectáculo que estaban dando la rubia y ella. – Macarena venga, suelta el vaso que nos vamos ya -.

- Nome quiero ir no vash a obligarme – respondió a duras penas.

- Si es necesario, no lo dudes. Venga vamos – la cogí de la mano y le di un tirón. – Suerte David, voy a llevármela ya -.

- Sí, yo intentaré meterla para adentro. Suerte para ti también -. David cogió a su mujer como si de un saco de patatas se tratara y la metió para adentro, desde la puerta dijo – Hasta mañana que descanséis -.

Ahora empezaba mi dilema con Macarena – Cariño mira ya se han ido a dormir, venga vámonos a casa por favor – dije con calma porque se me estaba agotando la paciencia.

- Me llevash en brazos – dijo apoyándose contra mí para no caerse – Como la primera noxhe -.

- Así que estabas despierta -.

- Shiii, pero queríah que me cuidarash -.

- Yo siempre voy a cuidar de ti – besé su frente – venga anda que te llevo en brazos – la levanté – agárrate a mi cuello -. Se acurrucó contra mí y fuimos a la caravana, menos mal que estaba a dos minutos porque la rubia pesa y bastante. Abrí la puerta y entré con ella, una vez dentro – Cariño ya estamos en casa voy a bajarte, la puse de pie delante de mí – Venga vamos a ponernos el pijama y a dormir, que mañana te vas a acordar de esto... - la rubia me negó con la cabeza.

- Quieroh que me hagas el amor – y se abalanzó sobre mí tirándome en la cama con ella encima, me estaba literalmente comiendo la boca – Rubia no... así no – pero me seguía besando apasionadamente y acabé cediendo. Le di la vuelta quedando encima de ella, bajé a su cuello y a los dos minutos de estar besándoselo con calma, la sentí respirar pausadamente. – Macarena Ferreiro... un día de estos vas a matarme – se había quedado profundamente dormida, lo que no me extraña con la cantidad de tequila que ha tomado. La acurruqué contra mí abrazándola por la cintura, le di un beso en los labios y le dije bajito – Descansa que yo cuidaré de ti -.

Siguiente cap: 14. Primera Pelea