El joven Xuan Da se mete en medio.

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Xia Yao se hizo paso entre la multitud hasta llegar al frente, con miedo de que no se pudieran controlar al intentar minimizar el daño y la pelea se intensifica.

Entonces las medidas serían mucho más duras y él tendría que afrontar una cantidad de pérdida. Dio varios pasos hacia Xuan Da Yu hasta que se pudo colocar detrás de él. Puso su muñeca en la garganta del otro joven, aprisionando y le quitó el palo de las manos.

El enfadado "nabo blanco" le gritó a Xuan Da Yu: -¿Estás j*didamente loco?

Le gritaba a Xuan sujetándolo con una mano, mientras con la otra advertía a la gente alrededor. Este es mi amigo, Cualquier cosa que él haga, la responsabilidad recae en mí. No debéis tocarlo nunca.

-¿Quién es él loco? -El rostro rojo de Xuan Da Yu le cuestionaba a Xia Yao regañándolo. -¿Les dejas que te golpeen?¿No tomas ninguna represalia? ¿Este cabeza de asno piensa que puede golpearte?

Xia Yao respondió: -¡Esto es entrenamiento!

-¿Es el entrenamiento así de incómodo? ¿Eres golpeado y lo llamas entrenamiento? Obviamente esa basura te está arrastrando. ¿Por qué debería apoyarse en ti?

Xuan Da Yu apuntó al instructor que lo había golpeado cubriéndose la cara. -Tú... ¿Te crees que eres el jefe comandante militar de la región? ¡Peleándote con quién quieras! Este entrenamiento es para que tu presumas de tu fuerza, ¡si quieres probar tu propia medicina ven aquí!

El instructor no hablaba Chino con fluidez pero entendía que había sido retado para una pelea, su corazón por supuesto salto en respuesta. Apretando su puño esperando poder entrar dentro de la sala, pero fue frenado por un gesto de manos.

-¡Que c*ño pasa con tu ida de olla! -Xia Yao colocó su puño en medio del pecho de Xuan.

Xuan Da Yu carraspeó, sus mirada afilada se giró cambiando su atención del instructor a Yuan Zong.

-Te lo digo, ¡Qué equipamiento tan genial crees que tienes! Me has cabreado, tu compañía de guardaespaldas debería cerrar. ¿Golpeas a los alumnos? ¡Cuando sea el momento de que abandones, recibirás una bofetada enorme!

Yuan Zong no dijo nada, sus ojos eran tan afilados como un cuchillo, cortando y atravesando los nervios de Xia Yao.

Xia Yao apretó fuertemente sus brazos, sujetando a Xuan Da Yu mientras lo apremiaba a que cerrara la boca mientras lo protegía y lo arrastraba fuera. Cuando pasó al lado de de Yuan Zong, Xia Yao se quedó mirándolo fijamente a los ojos durante un rato, hasta que Xuan Da Yu fue arrastrado fuera de la multitud de una forma intachable, y la ira que había brillado en sus ojos se fue disipando.

Yuan Zong vio en sus ojos una necesidad inevitable, un verdadero hombre que estaba dispuesto a defender a su estúpido amigo. Si usaba esta oportunidad para golpear a Xuan Da Yu, Xia Yao saldría herido en el camino, y crucificado con él.

Por la más mínima molestia que le pudiese causar a Xia Yao, aunque quedará en evidencia, él también debía de soportarlo.

Poco después, entre la multitud se empezaron a oír comentarios y maldiciones por parte de todos.

-¿Así que vamos a dejar que se vaya?¿Después de algo así?¿No es demasiado arrogante?

-¿Cómo puede haberse enfadado?¡El segundo oficial es asombroso!

-....

Yuan se giró y miró directo a la multitud para añadir simplemente: -Continuar con el entrenamiento.

En un principio, habían varias personas que querían crear alboroto, pero tan pronto como vieron la mirada de Yuan Zong, se quedaron callados y caminaron hacia el campo de entrenamiento.

Cuando llegaron al coche, Xia Yao se giró para mirar directamente a Xuan, la vergüenza era plausible en todo su rostro.

-¿Cuál es tú problema?¿Qué... estabas haciendo? Fue solo una patada. Eso es todo. ¿Quién no ha sido golpeado en su vida?

La respuesta de Xuan Da Yu fue directa: -Puede golpear a quien quiera. No me importa siquiera si me golpea a mi, ¡pero no pienso consentir que te golpeen! -Xia Yao no podía decir si estaba enfadado o conmovido, de todas formas, el sentimiento era raro, sacó un cigarrillo, mientras quemaba el sentimiento fumando.

Xuan Da Yu continuó: -¿Aún te acuerdas? Cuando éramos jóvenes, la gente solía burlarse de ti, y yo siempre te defendía. Aunque hemos crecido, es lo mismo. Ahora quieres ser golpeado, ¿por qué?

-Mis habilidades son mejores que las tuyas, ¿Por qué deberías de protegerme?

-¡Pero tú eres más blanco que yo!

Xia Yao dejó salir parte de su rabia: -Quién luce más o menos blanco... ¿Qué tiene eso que ver con tu temperamento?

-Cuando alguien es tan blanco como tú, es fácil despertar el deseo de abuso de los demás. -Contestó Xuan.

Xia Yao apagó la colilla y apoyó su cabeza de nuevo en el respaldo del asiento, pero no dijo nada más.

Xuan Da Yu estaba leyendo un libro a su lado.

-Especialmente ese señor, he visto como se quedaba mirándote todo el rato, no me dejaba verte entrenar,

-¿Qué señor? -Xia Yao abrió los ojos.

-El jefe de instructores, ¿Lo llamaste Yuan?

Señor... los ojos de Xia Yao se abrieron de golpe, -¿Te parece tan viejo?

Xuan Da Yu levantó las cejas. antes de contestar: -Si no es tan mayor... ¿Entonces porque estás dispuesto a escucharlo?

-No es que este dispuesto a seguir lo que dice, habló sobre otra cosa. Solo tiene 30 años, no es mucho mayor que nosotros, pero él empezó de la nada, desarrollando su compañía él solo, y no es un trabajo fácil... lleva años de duro esfuerzo.

-¿Qué... tipo de esfuerzo? No creo que sea suficiente. Incendiaría el lugar.

Xia Yao sabía que estaba perdiendo el tiempo, Xuan se estaba portando como un niño. Mientras no fuera capaz de entender lo que estaba enfrente de él, rompería todo lo que estuviera a su alcance y lo tiraría al barro.

Después de unos minutos de silencio, Xuan Da Yu añadió: -Lo que acaba de hacerte el extranjero... j*der, bajate los pantalones, quiero ver si te ha dejado algún moretón.

Xia Yao arrugó el entrecejo: -Quitarme los pantalones a plena luz del día... Ah ah... ¿qué tipo de burbuja tienes por cerebro?

-¿De qué tienes miedo? Somos solo nosotros 2.

-¡... Incluso aunque seamos solo nosotros... No esta bien... Ah! -Dijo Xia Yao con un tono determinado.

Xuan Da Yu empezó a reírse: -Cuando eras un niño, ¿No ibas con el culo al aire corriendo por toda la casa? ¿Cuántas veces te pellizque las nalgas haciéndote enrojecer de vergüenza?

-Eso era cuando era niño, ahora he crecido... ¿Como seguiría siendo posible?

Xuan Da Yu continuó: -Está bien, no te miraré los huevos, solo me fijaré dónde te han golpeado.

-...

-Solo bájatelos un poco, por un lado.

Xia Yao ya no pudo soportarlo más y le gritó: -¡Qué te j*dan!

Y apretó el acelerador.

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¿Soy yo o la relación de estos dos es un poco íntima? Xia Yao mejor no le cuentes todos esos detalles a Yuan Zong o probablemente no te deje salir de su habitación de por vida...

¡Gracias por leer.. y Avanzar Valientemente!

Advance Bravely En EspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora