Solo un beso

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Sam- Joder mira por donde vas- dijo ya que le había tirado toda la bebida.

Fla- Creo que tienes que dejar de beber. ¿No crees rubia?

Sam- A eres tú.

Fla- Me alegra que te alegres de verme.

Sam- Me he pasado toda la noche buscandote, pero como no te encontraba he decidido empezar a beber y bailar. - dijo Samantha irónicamente.

Fla- Sabía que era irresistible pero no tanto.

Sam- Eres un gilipollas. - dijo mientras rellenada el basó vacío de una bebida alcohólica que ya ni sabía que era, fue lo primero que encontró.

Fla- No me esperaba que fueras tan adicta al alcohol.

Sam- No lo soy, esta es la segunda vez que bebo en mi vida.

Fla- No creés que ya es suficiente por hoy?

Sam- Nunca es suficiente, nunca.

Fla- Eso es mentira- dijo cogiendo el basó de la rubia y bebiendo su contenido trabando todo de un sorbo.

Dejó el basó en la mesa, acercándose peligrosamente al cuerpo de Samantha.

Fla- Como te vuelva a ver bebiendo te tiro por la cabeza se a lo que se que bebas.

Sam- No eres mis padre.

Fla- Ves con tus amigos a bailar.

Sam- Gilipollas.

No había vuelto a beber desde hace una hora que era el tiempo que había pasado desde mi pequeña convesación con Flavio.

Seguíamos bailando ya eran las doce pasada. Entonces vino Hugo donde no encotrabamos y nos ofreció jugar a la botella. Todavía iba un poco borracha, pero no tanto como antes, al no estar bebiendo en una ahora, parecía haverse bajado el efecto. Decidimos aceptar y nos llevo a una mesa al rededor se sofás y sillones. Parecían que los habían movido para tener un círculo y todos estar al rededor de la mesa, que se encontraba una botella de cerveza de cristal. Al rededor de la mesa se encontraban el grupo de amigos de Eva, Anaju, Hugo, Anne y Gerard, pero los dos últimos pronunciados parecía que no iban a jugar ya que se estaban liando en la esquina de un sofá. También estaban los tres chicos, nosotras y un par de chicos y chicas más.

Nia- Falta alguien?

Anaju- Flavio me ha dicho que iba a jugar. Pero no se donde está?

Eva- Por ahí viene.

Al escuchar el nombre Flavio, mi corazón salí por mi boca y todo mi cuerpo se tenso y si me tocaba besarme con el. Quite esos pensamientos de mi mente y decisión olvidarlo, además solo sería u  pico y nunca me tocará con Flavio.

Anaju- Pero si jugamos, jugamos bien, con un morreo no con un pico como en primaria.

La verdad es que todos acepataron y yo no iba a ser menos. La botella giraba y las rodas iban pasando. Me tocó besarme con Mai y Javy, la verdad es que no me molesto mucho besarlos.

La rondas iban pasando y la botella paro por primera vez delante de Flavio, si soy sincera,pe puse muy nerviosa. Tenía ganas de que me tocará y a la veces me daba un asco hacerlo. Nia giro la botella, esos segundos se me hicieron eternos y cuando veía que la velocidad de la botella iba frenando decido dejar de mirarala, como si así no me podria tocar.

Me notaba observada y levante la vista de mis pies para comprobar que era verdad mi sensación y era cierto todos me miraban. Mi vista se dirigió a la botella y esa me señalaba a mi, lleve mi vista a los ojos de Flavio y luego mire a Maialen, quien tenía una sonrisa de oreja a oreja, luego mi vista se fue a la de Eva, que me miraba con mala cara, pero no le dijo impotencia.
Vi como Flavio se levantaba de su sitió y se dirigía hacia mi. ¿De verdad me iba a besar? Mis piernas respondían por si solas si  hacer caso a mis cabeza y se levantaron del sofa para andar hasta Flavio. Acabamos en medio del círculo enfrente se todo, y el solo dijo.

Fla- Si no lo quieres hacer no pasa nada

Sam- Solo es un simple beso.

Nos miramos por unos segundo a los ojos, si ojos eran tan preciosos aunque fueran marrones un color muy común, para mi eran los más hermosos y únicos que había visto jamás. Mi vista bajo hasta sus labios, eran finos y rosados, tenían una forma perfecta. El me cogió de la mejilla con su mano, su mano estaba fria, comparada con mi mejilla, que llevaba un buen rato sonrojada. Se iba hacercando poco a poco. Hasta que mis labios y los suyos, se pegaron. Era un beso lento y dulce, algo en mi se estaba encendido. Mil mariposas voloteaban en mi estómago, era preciso y extraño a la vez. Separe mis labios de los suyos. Nos quedamos a menos de un centímetro, y no pasó ni un segundo cuando nuestros labios se volvieron  a juntar. Esta vez el beso era más apasionado, sus manos bajaron por mi cuerpo hasta llegar a mi cintura y corto la poca distancia que había entre nosotros. Mis manos fueron a su nuca para profundizar el beso. Nuestra lenguas comenzaron una guerra y aprecia que ninguna tenía la intención de terminar la lucha.
No se cuanto estuvimos besandonos, pero para mi solo fuero unos segundos. El mundo parecía que sabía parado y solo éramos el y hoy en esa habitaciones.
Nos separamos, nadie decía nada y volvimos a nuestro sitios avergonzados por lo que cavaba de pasar, al menos por mi parte.
Quería correr salir de esa casa, todo el mundo me miraba, no lo aguantaba a si que lo hice.
Nunca antes me había sentido así de intimidad, ser el centro de atención era nuevo para mi, la situación era muy incómoda.











Gracias a todos por leer la historia, perdón por no subir estos dos últimos días.

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