MS- ¡Samantha Gilabert ven aquí ahora mismo!
Ese fue el grito de mi madre que me despertó esa mañana de sábado. Me tomé mi tiempo para bajar, pero me arrepentí de tardar tanto en bajar por la cara de mi madre.
Sam- ¿Qué pasa?
MS- ¿Me puedes explicar que es esto?
Sam- Una revista mama.
MS- Sam no te rías de mi en mi cara.
El la portada de la revista salía una foto mía y de Flavio, de ayer caminando por las calles, cuando volvíamos de la pequeña cala.
Sam- Mama no es mi novio, solo es un amigo.
MS- Espero que sea solo un amigo, sabes lo que pienso de los chicos.
Sam- Mama si tu relación con papa no funciono, no significa que las del resto del mundo tampoco y si quiero puedo tener novio.
MS- Pero cuando te rompan el corazón y te hagan daño, no me vengas llorando.
Sam- Tengo dieciséis años mama, nunca necesite tu consuelo.
MS- Siento que de pequeña no tuvieras toda mi atención cariño, pero ahora estoy aquí contigo, en cambio tu padre a rehecho su vida con otra familia y nos a olvidado.
Sam- No se si te has enterado pero el domingo pasado fui a la fiesta de papa. Parece que el me presta mas atención que tu y teniendo a otra familia a la que cuidar.
MS- Retira lo que acabas de decir.
Sam- no mama.
MS- estas castigada, este fin de semana no sale te quedaras en cas pensando en todo lo que acabas de decir por esa boquita.
Sam- No me puedes castigar por decir la verdad.
MS- Si continuas así, serán mas que este fin de semana.
Me fui del salón para la cocina, cogí un bol de cereales sin leche y me fui a mi habitación.
|| Sam || Lo veis normal, encima va i me castiga.
|| Nia || A lo mejor te has pasado un poco. Creo que ella se preocupa por ti.
|| Sam || No me digáis que estáis de su parte.
|| Mai || Claro que no.
|| Nia || ¿Vendrás esta tarde al partido?
|| Sam || Me la apañare para ir, hablare con mi madre y que entre en razón o si no me escapare.
|| Mai || Si no la convences avísame tengo un plan para que escapes tu.
|| Sam || Si no te mando ningún mensaje antes de la seis, pon tu plan en marcha.
|| Nia || ¿Y de que se trata el plan?
|| Mai || Sam tu solo quédate en tu cuarto y no salgas.
|| Sam || Vale, ese es tu gran plan.
|| Mai || Tu pon al pestillo en tu puerta, prepara tu mochila y vístete antes de la seis. Yo te sacare de la cárcel.
|| Sam || De la cárcel te tendré que sacar yo algún día de estos.
Continuamos hablando hasta que llego la hora de prepáranos para el partido de esta noche. Hoy no jugaban en nuestro instituto a si que supongo que Mai entrara por la ventana como hago yo cuando me escapo de casa y me llevara en su coche.
Eran las seis pasadas y nadie se asomaba por esa maldita ventana, llame a Mai, pero salía el contestador. Eran las seis y media pasadas, el partido era a las de aquí unas dos horas, teníamos que estar ahí una hora antes y el trayecto en coche no eran diez minutos expresamente.
Sonaron unos golpes en la ventana.
Sam- Joder ya era hora Mai. – dije mientras me dirigía hacia la ventana.
Fla- No creo que tenga aspecto de chica y menos de Mai.
Sam- Joder. ¿Qué haces tú aquí?
Fla- Te vengo a salvar de la malvada bruja. Para llevarte al país de donde eres.
Sam- Que bien pues que haces ahí en la ventana que no me dejas bajar. Tenemos que irnos antes de que mi madre se dé cuenta.
Fla- Pues vamos, pequeña princesita.
Sam- No me llames así, pesado.
Ya abajo caminando por las calles.
Sam- ¿A ver listo ahora como llegamos al partido?
Fla- Pues en coche, he venido hasta aquí en coche esta a dos calles esperándonos.
Sam- No se lo habrás dicho a alguien?
Fla- Tranqui, Mai me ha dicho que no se lo diga a nadie y confió en Carlos, mi chofer.
Sam- ¿Y porque no h venido Mai a buscarme?
Fla- Me ha llamado justo antes de que saliera de casa, diciendo que me cuele en tu casa por una ventana y te llevara al partido. Has tenido suerte de que aún no había salido de casa, porque he tenido un problema y he avisado de que llegaba tarde.
Sam- ¿No te ha extrañado lo que te ha dicho?
Fla- Claro que le he preguntado, pensaba que era una broma, pero me ha explicado que tu madre te había castigado.
Sam- aja.
Llegamos a su coche y nos subimos dirección al campo de futbol, que eran unos vente minutos.
Fla- ¿Te puedo preguntar porque te han castigado señorita?
Sam- Bueno, no se si has visto, esto…
Fla- ¿La revista?
Sam- Si, mi madre se piensa que eres mi novio y yo le he dicho que solo somos amigos millones de veces. No le entra en esa cabezota que tiene.
Fla- Bueno en eso te pareces a tu madre.
Sam- No estamos hablando de mí.
Fla- Venga continua, no te interrumpo más.
Sam- Ella esta encabezonada de que no puedo tener novio y se piensa que voy a estar toda mi vida con ella en esa maldita casa. Se piensa que todas las relaciones del mundo son como la suya, que me aran daño y me romperán el corazón y eso yo ya lo se es lo malo de enamórate de una persona. Creo que tiene miedo que me quede sola como ella, pero no entiende que ella nos soy yo. Pretende darme lecciones de vida ahora, cundo llevo dieciséis años cuidándome mediadamente cuidándome sola, lo siento, pero no lo acepto.
Fla- No sé decir yo…
Sam- No tranqui no hace falta que digas nada.
Fla- ¿Te ha molestado lo de las fotos?
Sam- A mí me da igual, ambos sabemos que somos solo muy buenos amigos. ¿Y a ti?
Fla- Pienso lo mismo que tú.
Sam- Lo único que me molesta es que se metan en nuestra vida privada, dejando aparte si estamos juntos o no, es nuestra decisión si queremos hacerlo público o privado. Que pasa si no queremos que nadie se entere, pero eso a ellos les da igual.
Fla- Lo que no me extraña que hubiera noticias de ti cada dos por tres escapándote de casa o caminando sola por las calles.
Sam- Ya sabes que soy una experta para pasar desapercibida ante la gente.
Fla- Últimamente no te está saliendo muy bien.
Sam- Que gracioso. ¿Cuánto falta para llegar?
Fla- No faltara mucho.
Intentare subir los capítulos a esta hora cada día y no tan tarde como hasta ahora.
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Quiéreme
RomanceHISTORIA COMPLETA Una niña que tan solo con seis años tuvo que aprender a vivir sin ser querida. Solo quería sentir ese sentimiento de echar de menos a una persona, que la cogieran de la mano y pasear por las calles, reírse de un mal chiste o unas c...