Somos chocolate

08

Al día siguiente Teddy volvió, no podré olvidar la reacción que tuvo cuando le enseñamos el mandil blanco que habíamos comprado de su talla. Ese día se entretuvo decorando su delantal, dentro de unas horas pasó de ser un color blanco aburrido a una bomba de color.

Luego lo mandamos a bordar, para que al final un delantal con las letras "Ayudante. Theo Grey" descansara colgado en el perchero de los "empleados".

Teddy estuvo yendo al local toda una semana completa, hasta que por fin su papá tuvo tiempo de entrevistar e investigar a las candidatas para el puesto de niñera. Lo malo es que según Teddy consiguió una niñera que era muy aburrida. Obvio que me puse triste al igual que el pequeño cuando nos enteramos que ya no pasaría tanto tiempo en el local, pero acordamos que aquí siempre sería bienvenido.

Ha pasado una semana desde que Teddy vino al local por última vez y desde esa vez ni Luke ni yo hemos hecho galletas.

Mi comunicación con Christian (ya me había pedido que no le dijera Señor Grey) era mi pan de cada día, pues me mandaba fotos de Teddy, luego yo le respondía con otras fotos haciendo cosas en la tienda, mostrándole la soledad mía y de Luke . Algunas noches hacíamos videollamada para que Teddy me contara de su "aburrido" día y yo le contaba como iban las cosas en el local. Era increíble la relación que yo estaba forjando con el pequeño.

Ah, como dato....Christian seguía pensando que yo solo era Rose Adams.

Un mensaje hizo que saliera de mis pensamientos, dejé las donas friéndose. Esa era la especialidad del día de hoy.
"Donas de chocolate".
Me limpié las manos para quitar los rastros de harina y agarré mi celular, sonreí al ver que era un mensaje de Christian.

De: Christian Grey.

Rose, buen día, hoy por la mañana antes de irme a trabajar vi que Teddy me había dejado un recordatorio (supongo que lo escribió Gail) para que te dijera que extraña tus galletas.

Buenos días .

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Sonreí y me dispuse un contestarle.

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De: Rose Adams.

Christian, buenos días. ¿Serías tan amable de repetirle (OTRA VEZ) al pequeño que no he hecho galletas desde qué el no viene a ayudarme?:((

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De: Christian Grey.

Si es así,  ¿Cuál es la especialidad de hoy, señorita Adams ?.

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De: Rose Adams.

La especialidad de hoy son unas ricas donas de chocolate, Señor Grey.

PD: por favor, solo dígame Rose.

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De: Christian Grey.

¿Todo siempre es sobre chocolate?.¿Ricas ?, ver para creer, Rose.

PD: Por favor, solo dígame Christian.

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De: Rose Adams.

¿Hambriento ?, puedo solucionarlo. Y claro que mis Donas son ricas.

Pd: nunca es suficiente chocolate.
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Luke me recordó que las donas se me podían quemar, así que ya no pude ver la respuesta de Christian porque dejé el celular para seguir ocupándome de mis responsabilidades. En cuanto terminé algunas donas, coloqué 4 en una caja y me fui a preparar un Café. Le mandaría este desayuno a Christian con un repartidor, me hubiera gustado entregárselas personalmente, pero hoy era un día de mucho trabajo y seria muy cruel dejar a Luke solo. Le escribí una nota rápidamente

Luego, Le di todo al repartidor, casi se le salen los ojos al leer la dirección y para quien era el pedido.

CHRISTIAN POV:

Acababa de salir de una reunión, llegué a mi oficina, necesitaba sentarme. Dios, necesito un respiro. Estaba cansado, tenía mucho trabajo el día de hoy y todavía no había desayunado, el no comer a veces me ponía de malas.

Grey, tú siempre estás de malas.

Revisé mi teléfono y me llevé un poco de decepción cuando vi que Rose todavía no había respondido a mi mensaje.

¿Decepción ?, de seguro era hambre. Si, eso tenía que ser.

Tocaron la puerta, di la señal de acceso y vi como entraba Andrea con un café y una caja, Fruncí el ceño, yo todavía no le había ordenado ningún alimento.

—Señor, le trajeron esto. Ya fue revisado.–Dijo la rubia mientras lo ponía en mi escritorio.- Tenga, traía esta nota.

—Gracias, Andrea.–Dije serio, ese era el trato con mis empleados, pero ellos ya estaban acostumbrados.

Esperé a que mi secretaria saliera para revisar la caja. ¿Mi sorpresa ?, eran unas donas, y la caja traía el logo de la tienda de Rose, al igual que el vaso de café. Volví a sentir decepción al caer en cuenta que ella no traía personalmente este paquete. Agarré la nota mientras disgustaba de una dona, joder, si que estaban buenas. No era fan de la comida que no fuera tan nutritiva, pero esto era como tocar el cielo, sabían a gloria.

Para que tengas un buen día y no estés de mal humor. Me hubiera gustado entregártelas personalmente solo para burlarme de tu cara, mis donas son las mejores, ¿lo admitirás ?. Espero y las disfrutes.

-Rose<3

No sé cuantas veces leí la nota, pero supe que este detalle me había sorprendido cuando en todo el día no pude borrar de mi rostro una sonrisa. Que ricura de donas.