Me había quedado dormida en la habitación de Teddy, me desperté porque un olor que ya reconocía inundó mis fosas nasales.
—Hey, perdón si te desperté. – estaba en la puerta viéndonos preocupado.
—Lo bueno es que ya estás aquí. – sonreí, Christian se acercó y se sentó en el pequeño espacio que quedaba.
—¿Cómo está?.– le dio un vistazo a Teddy.— Mamá ya me dijo.
—Pues nos dormimos.
—Es peligroso que mi hijo pase tanto tiempo contigo, me lo harás una morsa floja. – abrí mi boca en señal de que estaba ofendida, me había llamado dormilona.
—Pues será una morsita muy linda. Y yo no soy tan floja, solo me gusta dormir.– me defendí. Iba a levantarme para dejar que Teddy siguiera durmiendo, me imaginaba que ya era muy noche.
Puse mi mano en su frente, la fiebre había bajado. Pero Teddy colocó su mano encima de la mía.
—Mamá ...– dijo entresueños. No otra vez. No, no, no.
Volteé a ver hacia Christian, yo estaba escandalizada, pero él solo lucia sorprendido. Me levanté para salir del cuarto como alma que lleva el diablo.
—Hey, ¿qué pasa? .– Christian llegó al pasillo en donde yo estaba caminando en círculos. Mi mente va a colapsar.
—Yo .... es que.–titubeé.–Es la segunda vez que lo dice.
—¿Qué dice?
—¿Estás sordo ?, ¡me llamó mamá!.– me llevé las manos a mi cabello para jalarlo, yo iba a colapsar.
Christian se acercó a mi para callarme con un beso. El sentir sus labios con los míos provocaba que yo sintiera una extraña sensación de calor, era tan cálido ... como si fuera verano.
—¡Eso como va a calmarme! .–dije en cuanto me separé de él y rompí el beso. Esto no estaba bien.
—Ana, cálmate. Mira, pasas mucho tiempo con él, obvio que te ve como una persona a la que quiere mucho. – ni el sabía lo que estaba diciendo. — No pensó, lo dijo dormido. — ¿por qué Christian se veía tan calmado con está situación?.
—¿Por qué no me dijiste que habías dado mi número para alguna emergencia?.
—Lo siento, lo olvidé.–claro Grey, como eso es algo que usualmente sueles no decirle a las personas.
—Llegaste tarde.– Christian colocó sus manos alrededor de mi cintura atrayéndome a él.
—Me urgía llegar, hice lo que pude. – susurró cerca de mi. —Me gusta como se te ve mi ropa.
—Lo siento.– mordí mi labio apenada. –Es que mi ropa se empapó cuando bañé a Theo y tuve que tomar prestado algo tuyo.
Me solté de su agarre para modelarle mi conjunto. Era uno de sus bóxers que estaba utilizando como short, y también una camiseta de él. Tenía que tratar de actuar como yo ... una persona calmada y divertida.
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Somos chocolate
FanfictionAnastasia era tan vainilla. Christian era chocolate. "Tú pusiste mi mundo patas arriba. Mi mundo era ordenado, calmado y controlado, y de repente tú llegaste a la vida de mi hijo y a la mía con esa alegria que te caracteriza. Me enseñaste a ver lo d...