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Y si alguna vez hubiera decidido cambiar algo de mi vida, sería parte de éste momento.

-Señor Kim, ¿entonces me dice que los claveles amarillos no serían un buen regalo para hija?

Nuevamente asentí, ya por quinta vez, está vieja mujer era un tanto sorda o no entendía lo que le había dicho.

-Entonces, ¿qué tipo de flor sería un buen regalo?

-Talvez unos claveles rosas señora

Dijo Jungkook tras mío, y su sola voz me hizo nuevamente sentir bien. Volteé a verlo, cuando su deslumbrante sonrisa hizo que mi corazón palpitara rápido, tanto que sentí que mi corazón estaba por salirse de mi pecho.

-¡Oh! Entonces llevaré esos

Respondió la mujer con una sonrisa, yo sólo asentí, levantandome para ir por los claveles rosas.

Después de entregarle las flores a la mujer y al fin ver conformidad en su rostro, terminó mi día.

-Hiciste bien tu trabajo Tae, pero intenta la próxima vez ser un poco más paciente con las personas de edad o cualquier otra persona, sino espantaras a los clientes

Dijo él abrazandome, poniendo sus brazos alrededor de mi cuello, mientras yo tomaba con delicadeza su cintura, él depositó un corto beso en mis labios.

-Diría que la paciencia no es una de mis virtudes, bonito

Él soplo mi rostro en un gesto de burla.

-Esté trabajo requiere mucha paciencia amor

Y esa era la razón para no dejar mi anterior trabajo, con todo lo ahorrado pusimos está florería, por la cual no me quejaba en su totalidad, ya que al parecer había muchas personas que compran flores aquí en Milán.

-Y por eso deberías ser tú quien atienda

Él rió y picó mi nariz con uno de sus dedos mientras se separaba.

-Es un negocio nuestro Tae, yo me encargo un día, tú el otro, así tenemos tiempo para dedicarle a la casa, ya te lo había explicado

Asentí con un puchero en mis labios, él tenía razón, no era el trabajo más pesado del mundo, pero no era mi favorito, traía buenas ganancias que implicaban una buena recompensa, y todo eso nos llevaba a haber cambiado de casa ya hace unos seis meses. Habíamos permanecido unos dos años con seis meses en este lugar.

-Si amor...

Rió suavemente, entretanto llevaba uno de sus mechones detrás de su oreja. Nos sonreímos con cariño.

Ya llegó la noche, yo me había adelantado, él decidió a petición mía quedarse a limpiar, y todo para algo que yo le mostraría a su regreso.

Ya lo había planeado desde la mañana, cocine bastante temprano mientras él dormía, ya que Jungkook casi nunca se acercaba a la cocina. Ahora sólo debía calentar lo que ya había preparado, todo saldría bien, si así el destino lo quería.

Él llegaría en al menos unos cinco minutos, eso lo sabía de acuerdo a la llamada que me había hecho hace un par de minutos, yo ya tenía todo listo, había tomado rosas rojas de nuestra florería, ya que eran sus favoritas, estaba todo listo, las velas, la comida, el ambiente e incluso cantaría para él, todo para celebrar dos años juntos y también celebrar un nuevo comienzo, eso si él lo aceptaba.

Esperaba que él lo aceptara.

Esto no estaba saliendo como lo hubiera querido, prácticamente él llevaba unos 45 minutos de retraso y la comida ya se había enfriado, ya había apagado las velas y si no empeoraba, esto no terminaría siendo un desastre.

¡Solo Di Perdon!- Vkook [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora