Durante mi paseo matutino fui recogiendo las ramas delgadas y torcidas que encontré. También unos nudos que parecían caracoles y muchos hilos de distintos colores y texturas. Al estar en mi taller, uní los hilos a los nudos, luego, con mi martillo y unos clavos de bambú uní las ramas a los nudos. Tomé la escueta figura y la coloqué junto con mis otras creaciones que ahora respiraban llenas de vida luego de un baño a la luz de la luna. Me senté a admirar ese bosque de plata armado por un carpintero con retazos de cosas que nadie quería.
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Mis microrelatos - Cabos sueltos
Short StoryEste es una compilación de micro-relatos que inició el 22 de junio de 2020 gracias a un reto iniciado por mis amigos del curso de escritura que tomé en la librería Sophos. Nos propusimos escribir 100 palabras por día. Cada capítulo es único y no tie...