Llegó el anhelado y temido momento en que debía extender mis alas para recorrer el mundo. Mi temor era no poder volver a la coraza de tus abrazos cuando hiciera mal clima. Ese apretado capullo, que hasta cierto grado me avergonzaba por su simpleza, era también el lugar donde conocí un amor sin límites que no sabía valorar del todo. La metamorfosis inevitablemente cambió nuestras vidas, emprendí el vuelo con destreza y emoción. Luego de un tiempo volví y no te gustaron los colores y formas que tomaron mis alas, anhelabas a ese frágil, tierno y manejable gusanito que cuidabas.
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Mis microrelatos - Cabos sueltos
NouvellesEste es una compilación de micro-relatos que inició el 22 de junio de 2020 gracias a un reto iniciado por mis amigos del curso de escritura que tomé en la librería Sophos. Nos propusimos escribir 100 palabras por día. Cada capítulo es único y no tie...