Cuando te conocí paraste el tráfico de mi sangre unos segundos y pusiste un alto a mi respiración. Tu mirada profunda, nariz chata y aura angelical detuvieron el ruido de mis pensamientos. Me saludaste con cortesía y fui recuperando mis sentidos mientras te veía y escuchaba con precaución. Noté tu inteligencia, rectitud y disponibilidad para ayudar y así fue como caí rendido. Ese fue el momento cuando mi alerta cambió a confianza. Empecé a buscar tu amistad y cuando me sonreíste con curiosidad sentí que tu alma me daba luz verde para enamorarte y recorrer juntos un camino de aventuras.
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Mis microrelatos - Cabos sueltos
Cerita PendekEste es una compilación de micro-relatos que inició el 22 de junio de 2020 gracias a un reto iniciado por mis amigos del curso de escritura que tomé en la librería Sophos. Nos propusimos escribir 100 palabras por día. Cada capítulo es único y no tie...