Antídoto

17 3 0
                                    

Ese minuto entre la puesta de sol y la aparición de las estrellas es el momento ideal para beber el antídoto que me salvará. Desconozco el tiempo que llevará en hacer efecto, pero deseo con ansias que se mezcle rápido con mi sangre. Llevo muchas horas en este risco admirando a las nubes y las apariciones de unas criaturas a mi alrededor mientras otras se van a dormir. Si el antídoto funciona bien, seré parte del viento o amante de las olas. Sea como sea, dejaré de ver el mundo en sepia con mis limitados ojos humanos y seré libre.

Mis microrelatos - Cabos sueltosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora