Luego de un día agotador recolectando leña y café se decidieron bañar en esas pozas de agua caliente y aroma mineral. Estaban saltando de las más frías a las más calientes, apostando como tontos por quién aguantaría más. ¡Vaya si me entretienen estos bichitos! Me quedé dormida escuchando sus historias familiares que variaban de arrogantes conquistadores a valientes rebeldes que luchaban por no ser conquistados. Para su mala suerte, sus historias alimentaron mis pesadillas. Me revolví temerosa en sueños y lloré ríos de lágrimas naranjas. Ellos aún desnudos, huyeron asustados creyendo que me hicieron enojar. Yo lamenté, no poderme controlar.
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Mis microrelatos - Cabos sueltos
Kısa HikayeEste es una compilación de micro-relatos que inició el 22 de junio de 2020 gracias a un reto iniciado por mis amigos del curso de escritura que tomé en la librería Sophos. Nos propusimos escribir 100 palabras por día. Cada capítulo es único y no tie...