TU CAMINO : Después de Aristemo.

¿QUIÉN ES ÉL?

El fin de semana había comenzado ya con un video que dejaba bastante que desear para el fandom que no se tragaba el cuento del circo. Eso significaba tener que poner mayor esfuerzo en las siguientes ocasiones en público, el video fue bautizado como el "La avienta" tras las ediciones, ya que en la fiesta familiar, su madre lo había interceptado cuando quiso dejar de bailar, y la pobre chica fue obligada a hacerlo, por lo que luego de ese episodio no dudó en pedirle disculpas por la actitud de su madre, ya que aún faltaba el cumpleaños de Matías que lo celebrarían esa noche.
A media tarde cuando el rizado terminó de ver las ediciones del dichoso momento que su madre había subido a su perfil, y mientras esperaba al resto para ir con Matías, le pidió a la chica un momento para hablar.

- Sorry por lo que acaba de pasar, la verdad mi madre a veces no se mide, se deja llevar un poco- dijo Emilio un algo incómodo con la situación

-Sé lo efusiva que puede ser, es mejor olvidarlo e intentar pasarlo bien con Matías, además ahí vamos a estar con tu padre.
-No sé si eso es mejor o peor.

-Ánimo, una cosa a la vez ¿No?- sonrió Seidy tratando de subir el ánimo del rizado.

Durante el cumpleaños la mirada de su padre estaba sobre ambos, Seidy mucho más consciente de ello era quien más esfuerzo ponía ante las cámaras, Emilio por otro lado llegó a un momento en que comenzó a disfrutar en serio de la pequeña fiesta, bailando y cantando a turnos con el resto de los invitados.

En otro lado del país, en Guadalajara, Joaquín estaba a punto de terminar otra jornada más de su Purple Tour, su madre hace apenas unos minutos había alzado la voz para organizar a la gente que quedaba, que era bastante aún, eso indirectamente era un llamado de atención para él, ya que siempre sus deseos de estar con los fans le ganaban tiempo que podía dedicarles, resultando siempre en que se alargaran sus jornadas de firmas del calendario. Su rostro siendo regañado fue retratado por las fans que estaban allí con él, enterneciendo luego al fandom cuando fue subido a redes.

Ese sábado, el fandom no tuvo respiro. Ya que además de la historia de Niurka y las críticas y bromas hechas, más disfrutar del material del Purple Tour, en la noche fue la transmisión del programa de Álvaro Cueva Detrás de las Telenovelas que ese día contaba con un especial a la carrera de Juan Osorio. Entre los invitados a entrevistar estaba Emilio, y al ser mencionado lo que fue el fenómeno Aristemo, Álvaro le hizo la siguiente pregunta ¿Cómo fue besar a otro hombre en escena?

-¿Cómo fue?...-empezó a responder Emilio-como besar a cualquier persona que... el que Aristoteles besara a Temo era el levantar una bandera de orgullo y como actor era un crecimiento increíble para mi carrera, yo creo que muchos actores y me lo han dicho y no solamente de mi edad,omito nombres obviamente, me han dicho que no, que ellos no se atreverían a besar a un hombre en escena y ellos no se atreverian y creo que eso es lo que al principio, bueno, yo al principio cuando empecé la carrera decía 'Si lo divertido que eres camaleónico y que puedes hacer muchos personajes', pero cuando llega el momento de la verdad ahí es cuando la vida te voltea a ver y te dice '¿Qué pasó? ¿Ahora qué ?'...Habían dos reglas que esto no lo sabe la gente, había dos reglas de dirección que yo no podía dejar en Aristoteles era nunca dejar de ver a Temo a los ojos, osea siempre era verlo a los ojos siempre y Aurelio me decía 'eso para que, que vaya pasando el tiempo y tu y solita se va a dar, se va a ir dando una conectividad, pero ahorita no osea no la vas a sentir y vas a sentir muy forzado el verlo a los ojos porque te estoy bloqueando la mirada sabes y no puede ser natural al momento de que hablas' , eso y otra cosa era siempre siempre siempre estar como teniendo como siempre un pegue con Joaquín en el hecho de que si era esta escena se tenía que respetar, todo el mundo en el set la respetaba, se hacía como se tenía que hacer, las manos, todo se hacía profesionalmente, me hablaban por acá -indicó su oreja- entonces la escena corria muy bien y nosotros como actores no nos sentíamos incómodos o al menos yo en lo personal no me sentía nada incómodo, porque a veces la gente mucha gente se pregunta ¿Qué tan incómodo fue dar el beso? ¿Qué tan incómodo fue... este, tocarle las manos? ¿Qué tan incómodo fue tocarle el cuello? ¿Qué tan incómodo fue desvestirte en frente de él? son cosas que yo con 17 años puedo decir las hice y las hice con todo el respeto a la carrera y aparte las hice teniendo la conciencia de lo que estaba haciendo por los directores, por los escritores y por Juan obviamente, si no hubiera tenido ese apoyo, yo con mi edad osea creo que hubiera sido un paso muy difícil y hubiera sido diez veces más complicado de lo que fue.