Danica
Después de tres horas de pensar en qué ponerme, encontré el conjunto perfecto. Suspiré y entré a la ducha. Estoy emocionada por ir al cumpleaños de la hermana de Evan, será la primera vez que la veo. Decidí llevarle un regalo para ganarme su confianza y amistad, sé que las hermanas pueden ser algo celosas a veces. Le compré un perfume que acaba de salir y está por todos los carteles de Lima, seguro que lo está deseando tener. Evan sólo la ha mencionado una vez, pero me imagino que se deben llevar bien por lo que sólo se llevan un año de edad. Angela también me ha contado que es buena persona y se lleva bien con todos. No creo que sea difícil que nos llevemos bien también.
Salí de bañarme y me cambié. Me maquillé muy poco y me puse perfume. Salí de mi cuarto y toqué la puerta de Angela.
—¿Estás lista? —abrió la puerta y salió con un vestido verde—. ¡Qué linda! —sonreí.
—¿Qué es eso? —preguntó al ver la bolsa de regalo en mi mano.
—El regalo para Kiara.
—¿Por qué le estás llevando un regalo? —frunció el ceño.
—Porque es su cumpleaños.
—Danica, dime la verdad —sentí la tensión en todo mi cuerpo y tragué saliva—. ¿Entre Evan y tú pasa algo?
—No —respondí casi de inmediato—. ¿Por qué crees eso?
—Escuché unos rumores —lo que temía—. Dijeron que Evan estaba muy pegado a una rubia, que parecían estar juntos.
—Hay más rubias en mi promoción, Angela —reí nerviosa y me arreglé el cabello.
—Si pasa algo con él, me lo contarás...¿verdad? —asentí con la cabeza.
—Claro que sí.
—También sabes que es una mala persona, ¿no es así? —respiré hondo—. Que sólo te hará daño.
—¿Vamos? —pregunté mirando la escalera y ella asintió con la cabeza.
Quise gritarle que estaba equivocada, decirle que Evan no es una mala persona y que me ha hecho una persona más feliz desde que lo conocí. Mi hermana necesita vivir su vida a experiencia propia, no a base de rumores estúpidos que escucha de la gente.
Bajamos a la sala y mi papá ya estaba esperándonos para salir. Dijo que nos recogería a las once en punto, ni un minuto más, ni un minuto menos. No protesté, sólo porque mañana hay colegio. Subimos al carro y agradecí que estaba caliente aquí adentro. El invierno ya llegó a Lima. Me di cuenta que había olvidado mi casaca en mi cuarto y mi papá arrancó quitándome la oportunidad de subir a por ella.
Llegamos y ya había gente. Sobre todo bulla. Toqué el timbre y abrió el chico más lindo de la casa. Evan tenía puesta una casaca roja que lo hacía ver más lindo de lo normal. Sonreí y lo abracé muy fuerte. Me di cuenta de mi acción y me alejé tensa, porque mi hermana estaba atrás nuestro. Evan saludó a Angela y ella se perdió entre sus amigos.
—Vamos a la cocina, hay unos bocaditos demasiado buenos —me dio la mano.
Al entrar a la cocina nos encontramos con una chica de cabello castaño y ojos color avellana como los de Evan. Es casi de mi tamaño y tiene un vestido precioso, creo que es Kiara, la cumpleañera.
—Kiara, ella es Danica —mencionó Evan cogiendo un tequeño—. Danica, ella es mi hermana.
Kiara sonrió al verme y me abrazó. Me sorprendí al principio, pero luego sonreí y me sentí aliviada.
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Una vida contigo
Novela JuvenilEvan Radeguieri, un chico de 18 años tiene que luchar con los cambios de su último año escolar. Con un pasado complicado y un futuro desconocido, conoce a la chica de sus sueños y la vida parece tener un sentido distinto. Fan page en Instagram: http...