»God is a woman ✔️ +18 [ Lizkook ] [ Omegaverse ]

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Capítulo dedicado a __JeyL que ha llegado temprano al capítulo anterior. Estaré dedicando capítulo a quien llegué temprano. 💜💜💜

—Iré a la empresa, regresaré más tarde, desayuna bien y no estés levantando pesado, ¿De acuerdo? — la Omega asintió con un puchero en sus labios.

—Esta bien, Alfa — JungKook sonrió al ser llamado así y es que le gustaba que su Omega lo llamara de tal manera.

—Nos vemos más tarde — se acercó y le dió un beso en los labios, siendo un beso de piquito. —Cuídate.

JungKook tomó su portafolio, se dió media vuelta y salió de casa, rumbo a la empresa. Subió a su automóvil, lo encendió y emprendió marcha.

En el camino hacia la empresa, llamo a Jennie,  la beta que tenía como asistente.

—Buenos días señor Jeon, ¿Quiere que le lea la agenda de hoy?

—Si eres tan amable, por favor — JungKook dió vuelta hacia la derecha, entrando a una calle para salir a carretera.

—De acuerdo...a las once y media, tiene la firma de contrato con la empresa de lácteos y envasados, a las doce con veinte, tiene la reunión con su amigo, el señor Park JiMin en el restaurante Jungsik Seoul, de ahí tiene libre hasta las, tres de la tarde que tiene una reunión urgente con una Omega, llamada...¡Oh, es su esposa!

JungKook rió, esa Omega lo iba a matar de ternura en cualquier momento.

—De acuerdo, llegaré en treinta.

Y sin más, colgó.

JungKook continúo su recorrido a la empresa, mientras una sonrisa boba se asomaba en su boca. Y es que, ¿Reservar una cita urgente con él, cuando lo tenía todo el día en casa? Realmente era algo tierno de su Omega.

[ 💋 ]

—¡Jeon, amigo mío, que gusto verte! — saludo muy amigable un JiMin. JungKook se levantó de su silla y abrazo a JiMin, dándole unas palmaditas en la espalda.

Se separaron y ambos se sentaron. Se encontraban al final de aquel restaurante, su mesa estaba dividida, no como las otras, que estaban unidas por un sofá grande, la mesa y una silla al lado contrario.

—Buen lugar elegiste para charlar, Park — dijo, mirando discretamente a las demás mesas.

—¡Yah! Aquí sirven comida deliciosa, así que no te quejes — desdobló una servilleta y la puso en sus piernas. —Mejor dime, ¿Cómo va el embarazo de Lisa? — tomó la carta para buscar que pedir, al igual que JungKook, quien ya tenía la servilleta en sus piernas.