»God is a woman ✔️ +18 [ Lizkook ] [ Omegaverse ]

✨ EXTRA 5 ✨

—Jeon Yuna — la Omega dió un paso adelante y espero atenta a qué la maestra dijera en que salón debería ir.

Jungkook y Lisa se habían mudado a un lugar más grande y espacioso, con un hermoso jardín, esperaron a que Lisa tuviera una semana en reposo, después de haber tenido a los mellizos, para mudarse. A Yuna no le dolió ni afecto en absoluto el cambio, ya que ella no era muy social en su antigua escuela y no tuvo amigos. Así que no le afecto en absoluto.

—Salón 3-A, clase con la profesora Choi — Yuna asintió, empezó a caminar por el pasillo, buscando su salón. Al encontrarlo casi al final, se detuvo frente a la puerta, soltó un suspiro y tocó la puerta.

—Adelante — ella empujó la puerta, ya que era corrediza. Al entrar, varios pares de ojos se posaron en ella, haciéndola sentir nerviosa y ansiosa. —Oh, eres la de intercambio, ¿Cierto? — Yuna asintió. —De acuerdo, preséntate en lo que voy por tu horario y libros, ¿De acuerdo? — Yuna asintió.

La maestra paso por su lado y salió, cerrando la puerta. Su mirada cayó en todos los alumnos que estaban enfrente de ella, los escaneó con la mirada, incluso pudo notar la mirada de una que otra chica, mirándola de arriba a abajo con esa mirada juzgadora y superficial.

—Me llamó Jeon Yuna, mis padres son Jeon Jungkook y Lalisa Monoban, un gusto conocerlos — hizo una pequeña reverencia, mientras sus manos se aferraban a las correas de su mochila.

—¿Eres una Jeon? — ella alzó la mirada y vió a aquella chica, la cual estaba maquillada y parecía ser la más bonita del grupo. Yuna asintió ante su pregunta. —Vaya.

La maestra regreso, le entrego sus libros y horario, le dijo que podía tomar asiento en cualquier lugar. Ella optó por sentarse al final, junto a una banca vacía.

La maestra empezó con la clase, pero a los diez minutos, un chico entro al salón, todos lo miraron con cara de fastidio. Al parecer ya era costumbre interrumpir de esa forma la clase.

—¿Otra vez tarde, Kai? — la maestra se cruzó de brazos, harta de la situación.

—¿Lo siento? — eso sonó bastante sarcástico.

—Mañana quiero a tus padres en mi oficina, de lo contrario, no podrás entrar a la clase de mañana. Entre, siéntate y trata de poner atención a clase — dijo, con un tono molesto.

Kai asintió, entro en la fila correspondiente y se sentó al final, a lado de una chica...de Yuna.

Al sentarse, un aroma dulzón y para nada hostigante, llegó a su nariz. Frambuesas y arándanos con un toque de miel. Él aspiro un poco del aroma, haciendo que su lobo brincara de alegría y pidiera más de dicho olor.

Mientras que Yuna, sintió su Omega inquieta por el aroma del Alfa que se había sentado junto a ella. Un rico olor a tierra mojada y bosque llegó a su nariz. Trato de no darle mucha importancia.