Después de finalizar la Segunda Guerra Mágica, Adhara Phoenix Black ya no siente tener motivos para quedarse en Londres y decide irse al pueblo más nublado de Estados Unidos junto con su fiel Kreacher, sin saber que ahí encontraría lo que tanto habí...
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Adhara observó con cuidado cada detalle de aquel cuadro en el despacho de Carlisle. En aquel cuadro aparecían tres hombres que parecían ser de la realeza, sospechaba que se trataba de los Vulturi, y justo detrás de ellos se encontraba el patriarca Cullen.
-¿Qué hiciste por ellos? -le preguntó.
Carlisle estaba revisando unos papeles, que dejó de lado, cuando la que él consideraba una hija habló. Miró con detenimiento el cuadro antes de responder.
-Nada. Solo me fuí a vivir con ellos por unas décadas.
-¿Cómo fue vivir con ellos? Bella dijo que fue muy incómodo estar ante ellos.
-Fue una experiencia muy diferente, aunque nuestras creencias son totalmente diferentes. Ellos son lo más cercano a la realeza en nuestra especie.
-Entonces, ¿con ello quieres decir que son de los vampiros más antiguos?
-Así es. Han vivido por más de 3,000 años. Respetan las artes, la ciencia y las leyes más que a nada; pero no tienen respeto por la vida humana.
-Por eso no estuviste tanto tiempo con ellos, ¿eh? Y, ¿cuántas leyes tienen?
-Eres muy curiosa y muy inteligente. -la halagó con orgullo. -No son muchas, básicamente se resume en no mostrar nuestra existencia ante los humanos.
-Y supongo que los castigos no deben ser nada bonitos para quienes deciden violar esa ley, ¿eh? Oye, Carlisle, tú eres el vampiro más antiguo de los Cullen. ¿Nunca te has preguntado por qué brillan bajo el sol? Aún no lo entiendo y nunca lo voy a entender, he visto muchas películas de vampiros y hombros lobos, también me he leído varios libros y ninguno hace referencia a ello, al contrario, se desintegran como si de polvo se tratara ante el más mínimo contacto y ustedes son una bola de disco, sin ofender.
El rubio no contuvo la risa. Definitivamente aquella peculiar humana es muy espabilada y atenta al más mínimo detalle.
-Como tal no tengo una respuesta exacta a tu pregunta.
-De acuerdo, entonces, platícame de ti Carlisle. Puedo adivinar que eres de Londres aunque el acento no se te note mucho. ¿Cómo te convirtieron en vampiro?
-Nací en Londres, era 1640. Mi padre era pastor y cazaba vampiros, yo me hice a cargo de su labor una vez que él envejeció. Yo estaba de cacería en 1663 cuando me convirtieron. -respondió recordando su vida como humano y, posteriormente, como neófito. -Me aterroricé por completo, me habían convertido en el enemigo que más odiaba mi padre, por lo que me recluí a mí mismo. Traté de todo para matarme a mí mismo, no quería alimentarme de sangre humana, pero la sed solo iba en aumento y yo no quería hacerle daño a nadie.
El doctor hizo una pequeña pausa mientras que Adhara solo lo veía fijamente sin decir nada. Ella iba a preguntar algo hasta que Carlisle retomó su plática.
